martes, 29 de junio de 2010

Las heridas abiertas del Congo

Alberto II, rey de los belgas, llegó ayer a Kinshasa para conmemorar los 50 años de la independencia de la República Democrática de Congo (RDC), antiguo Zaire. Es un viaje de cuatro días marcado por recelos históricos y actuales. La visita real de Alberto y Paola es la primera a la ex colonia en 25 años, cuando fue Balduino. Para evitar desencuentros el rey no tomará la palabra en la cena de gala de hoy y mañana asistirá vestido de civil al desfile conmemorativo.

El rey Alberto de Bélgica y el presidente Kabila, ayer en el aeropuerto de Kinshasa.- ASSOCIATED PRESS

Las relaciones bilaterales nunca han sido fáciles. En tiempos del rey Leopoldo (1835-1909), Congo fue una finca particular del monarca y después una colonia en la que se masacró a decenas de miles de personas para la obtención del marfil y otras riquezas. Aquellos horrores quedaron inmortalizados en la novela El corazón de las tinieblas, de Joseph Conrad, de la que Francis Ford Coppola se inspiró para su película anti-Vietnam Apocalypse now. No es la única afrenta del pasado. La otra y más reciente es el asesinato del ex primer ministro Patrice Lumumba en 1961, poco después de la independencia. Sus hijos, coincidiendo con la efemérides, han pedido que se investigue a 12 belgas por el magnicidio.

Fue en enero de este año cuando el presidente de la RDC, Joseph Kabila, formuló la primera invitación verbal para que el rey asistiera a los fastos de la independencia. El Gobierno belga tardó dos meses en responder. Un retraso que molestó en Kinshasa, que lo tomó como un gesto inamistoso a sumar a otros, como las peticiones de algunas ONG para que durante la visita real se realizara una defensa del respeto a los derechos humanos. "Cuando en África se te invita a una fiesta deberías sentirte honrado", dijo el embajador congoleño en Bruselas. Estos disensos últimos son de pequeño calibre comparados con el choque diplomático de hace dos años, cuando el entonces ministro de Exteriores belga y hoy comisario europeo de Comercio, Karel de Gucht, atacó la corrupción de las élites congoleñas. Kinshasa acusó a Bélgica de añorar la colonización.

Esta vez, en una atmósfera más sosegada, el ministro belga de Cooperación, Charles Michel, insistió en la importancia del respeto a los derechos humanos, a los que supedita el desarrollo del país (es decir, la inversión belga), pero valoró la lucha contra la corrupción del Gobierno de Kabila. La delegación real es muy reducida, en buena parte debido al delicado proceso negociador para la formación del futuro Gobierno federal que se vive en el país. El primer ministro dimisionario, Yves Leterme, es la única figura política. Hace unos días, Bruselas reconoció que las entrevistas entre el rey y Kabila y entre los dos primeros ministros serán entre "socios iguales y soberanos y un diálogo franco abierto y constructivo". Pero lo que se digan unos y otros será a puerta cerrada. Las autoridades congoleñas no quieren sorpresas. Además de suprimir la alocución regia en la cena de gala, tampoco quiere que Leterme realice declaraciones durante los cuatro días marcados por entrevistas y visitas a empresas y centro educativos y sociales.

La RDC es uno de los países potencialmente más ricos de África. Tiene inmensas reservas de oro, cobre, diamantes, cobalto, coltan (en cuyo saqueo no son inocentes muchas empresas belgas, como denunció la ONU) y diversos minerales estratégicos. Medio siglo de independencia no ha mejorado la situación de pobreza de gran parte de sus 60 millones de habitantes, víctimas de la corrupción y la guerra. Desde 1996 han muerto en la RDC más de 4,5 millones de personas debido a la guerra en las regiones del este, una contienda en la que tampoco son inocentes países como Ruanda y Uganda. La ONU tiene desplegada una fuerza de 20.000 soldados y policías para impulsar los acuerdos de paz, nunca cumplidos del todo.

Joseph Kabila, hijo y sucesor de Laurent Kabila, el hombre que acabó con la dictadura de Mobutu Sese Seko, fue elegido presidente en 2006 en unas elecciones sin garantías. Sus promesas de democratizar y modernizar la RDC siguen siendo palabras vacías.

La complicidad de Bélgica en la muerte y desaparición del ex primer ministro izquierdista Patrice Lumumba va a planear durante la visita. Destituido y detenido, Lumumba logró escapar, pero fue capturado por los soldados de Mobutu y trasladado desde Leopoldville (actual Kinshasa) a Elisabethville (Lumumbashi), capital de una Katanga rica en minerales que buscaba la secesión con ayuda de Bélgica. Allí, Lumumba fue torturado, asesinado y su cuerpo disuelto en ácido en enero de 1961. En 2001, una comisión parlamentaria belga reconoció la "responsabilidad moral (...) de ciertos miembros del Gobierno belga y otros actores belgas" en aquella sangrienta operación. Bruselas pidió luego perdón a la RDC por lo ocurrido 40 años antes, pero el fantasma de aquel magnicidio no descansa. La iniciativa de los hijos de Lumumba demuestra que la visita de Alberto II no es una de cortesía. Las heridas aún no están cerradas.

Ricardo M. de Rituerto / Bruselas: Las heridas abiertas de Congo, EL PAÍS, 29 de junio de 2010

Joseph Pérez: «El pecado original de España es ser católica y latina»

El hispanista francés analiza en su ensayo «La Leyenda negra» el encono histórico hacia lo español

Espectacular retrato de Felipe II realizado por Sofonisba Anguissola en 1573Inquisitorial, ignorante, fanática. Esa es la imagen que ha sojuzgado a España desde el siglo XVI y que, en diferentes momentos históricos y por diversas circunstancias, ha servido a unos y otros como elemento de desprestigio. Estigma surgido durante el reinado de Felipe II como reacción del mundo europeo ante el poderío y expansionismo de los Habsburgo y que ha redundado en un complejo de inferioridad interiorizado por parte de los españoles. El prestigioso hispanista francés Joseph Pérez reconstruye en su ensayo «La leyenda negra» el origen y motivación de este discurso descalificador que ha atravesado la historia nacional durante cinco siglos.

«En el siglo XVI como en el siglo XX el país más detestado es al mismo tiempo el país más envidiado y admirado», escribe Pérez a la vez que compara la antigua situación hegemónica de España con la detentada en la actualidad por Estados Unidos. «Cuando una nación dispone de un dinamismo tan extraordinario como el de la monarquía de Felipe II es inevitable que esto suscite en contrapartida una reacción», afirma. Y pone un ejemplo: «Si ahora hablamos inglés en todas partes no es porque sea mucho más eficiente sino porque es el idioma de la economía. Lo decía muy bien Nebrija en 1492: la lengua es la compañera del imperio».

Lo paradójico, sin embargo, es que la leyenda negra no declinó con el fin de la supremacía hispana, sino todo lo contrario: tras la Reforma España pasó a ser sinónimo de fanatismo religioso y atraso. «El mundo moderno es considerado hijo de los anglosajones y de la reforma protestante», sostiene Pérez. Para la Europa del norte «las naciones latinas han perdido su gran oportunidad y no supieron estar a la altura de las circunstancias». Pero, a pesar de lo que se quiere hacer creer («ese mesianismo anglosajón que inspiraba tendencias imperialistas no exentas de racismo», como indica el estudioso), no fue la política la que se puso al servicio de la religión, sino la religión la que sirvió para justificar la política.

Naciones incapaces

«Hay algo de la leyenda negra que ha perdurado y no sé si ha desaparecido totalmente», señala el historiador. Un estigma que parece renovarse con la grave crisis económica. «El Fondo Monetario Internacional, que está formado fundamentalmente por representantes de los países del norte debe pensar, aunque no lo diga, que Grecia, España y Portugal, son naciones incapaces de desarrollarse. El pecado original de estos países es el de ser católicas y latinas», sostiene. Ese estigma se ha transmitido a toda la cultura hispana. «Al menos hasta los años cincuenta en el cine norteamericano el malo, el sucio, el maleducado era el mexicano o el indio. En los western, el caballero civilizado es el hombre del norte. Ahora son más prudentes», indica Pérez.

Al afán expansionista de España en el siglo XVI se le sumaron las acusaciones por haber actuado de forma infame durante la conquista de América, por la intolerancia de la Inquisición o la difamación de Guillermo de Orange, fundador de la leyenda negra, quien acusó a los españoles de barbarismo y a Felipe II de haber matado a su propio hijo (hecho que el estudioso francés desmiente rotundamente). Lo cierto es que España no fue ni peor ni mejor que las otras potencias. «La colonización europea de los siglos XIX y XX fue culpable de crímenes semejantes a los cometidos por los españoles», indica Pérez. E incluso defiende la patria de sus padres, emigrantes valencianos: «Que una nación capitalista no haya explotado tanto al hombre no quiere decir que tenga alguna culpa. ¿Qué es el capitalismo que ha triunfado en Inglaterra y Francia?- se pregunta el historiador- No es más que una forma de embrutecimiento y explotación del hombre».

Fernando Muslera / Madrid: Joseph Pérez: «El pecado original de España es ser católica y latina», ABC, 29 de junio de 2010

lunes, 28 de junio de 2010

Aparecen 120 Guerreros de Xian nuevos

Tres guerreros de terracota de Xian, dispuestos para el combate. MIGUEL BERROCAL

El equipo de arqueólogos de los guerreros de terracota de Xian, que este año han sido galardonados con el premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, desenterraron otras 120 estatuas que se suman a las 8.000 extraídas hasta ahora en la antigua capital china.

Entre estos nuevos hallazgos destaca la figura de un general que de mayor tamaño pero su escudo es más pequeño, delicado y mejor realizado, «lo que sugiere que es un general de alto rango», indicó el subdirector de excavaciones del Museo de los Soldados de Terracota, Shen Maosheng, en declaraciones hoy a la agencia Xinhua. Se trata del décimo general desenterrado desde que los guerreros fueron descubiertos en 1974 por un campesino en una zona cercana a la capital de la provincia noroccidental china de Shaanxi. Estos nuevos soldados han sido desenterrados en la tercera excavación, iniciada el 13 de junio de 2009. Los guerreros de terracota son uno de los símbolos más arquetípicos de la unidad cultural china, junto con la Gran Muralla, también del mismo periodo, porque fueron creados para ser enterrados con el primer emperador que unificó China durante la dinastía Qin (221-206 a.C.), Qin Shihuang.

En la zona de excavaciones, de 400 metros cuadrados, los arqueólogos trabajan en zanjas de 20 metros de largo por 3 de ancho donde desentierran con paciencia los restos de este auténtico ejército de arcilla que el primer emperador chino quiso llevarse al «más allá». El general de terracota se encontraba en el centro de la zanja, con los restos de un carro a ambos lados, y su parte inferior se conserva intacta, mientras que la superior está rota en pedazos.

EFE / Pekín: Aparecen 120 Guerreros de Xian nuevos, EL MUNDO, 28 de junio de 2010

El piloto de Hiroshima que se volvió pacifista

Un periodista mira la ruina de Hiroshima tras ser lanzada la bomba atómica. | E. M.Con 26 años y la desgracia de haber dejado tras de sí la estremecedora cifra de 200.000 muertos a sus espaldas, el piloto Claude Eatherly, uno de los que hizo Historia en Hiroshima el 6 de agosto de 1945, se puso a robar a su vuelta a Estados Unidos. "Entré en un comercio, saqué una pistola y ordené al cajero que metiese todo el dinero en una bolsa. Después salí de la tienda sin llevarme el dinero. Me detuvieron inmediatamente, pues sabían que ya había hecho lo mismo en otra ocasión. Fui reconocido por dos médicos, que me diagnosticaron una enfermedad mental y me internaron". Había sido apartado de las Fuerzas Aéreas y renegaba públicamente de aquella acción. Buscaba la forma de expiar sus culpas.

A punto de cumplirse el 65º aniversario de la hecatombre de Hiroshima y Nagasaki, la editorial Paidós recupera 'El piloto de Hiroshima. Más allá de los límites de la conciencia', que recoge la correspondencia entre el filósofo vienés Günther Anders y Eatherly, el piloto que, tras recibir la orden, elegió el blanco -un puente, aunque se desvió un kilómetro y acabó impactando en plena ciudad- y comunicó el 'go ahead' (adelante) al 'Enola Gay' para que lanzase la bomba sobre Hiroshima.

Explosión de la bomba atómica sobre la ciudad de Hiroshima. | E.No desgrana sus fantasmas en tono literario ni detalla su sufrimiento personal con frases redondas, pero, tal como le indica Anders, pionero del movimiento antinuclear, en la primera carta en la que le invita a mantener correspondencia, el valor de sus palabras reside en la terrible acción de la que fue partícipe: "Precisamente porque lo hizo podemos ver en usted, y únicamente en usted, qué nos habría sucedido de haber estado en su lugar, o de vernos algún día en su lugar".

La relación epistolar entre ambos, que comenzó en 1959, se prolongó hasta que en 1961 Eatherly se fugó del hospital. "La culpa ligada a este crimen ha llenado mi alma de confusión [...] He estado en hospitales y he pasado alguna que otra temporada en la cárcel. Tengo la impresión de que en la cárcel me he sentido siempre más feliz: el castigo me permitía expiar mi culpa", plasmó en una misiva fechada en 1960. "He hecho todo lo posible para convencer a los médicos y a la gente de que solo me anima un deseo: ver triunfar la paz y la igualdad entre los hombres y trabajar en favor de nuestra cusa. Puede que sepas que en este país no está demasido bien visto decir o escribir este tipo de cosas, por lo que me consideran un obstáculo", señalaba.

Eatherly se refería así a los continuos impedimentos e informes médicos en su contra que servían para mantenerlo encerrado. "Para la mayoría, mi rebelión contra la guerra es una forma de locura. Pero no hubiese podido encontrar otra manera de explicar a los hombres que una guerra atómica no solo trae consigo destrucción física, sino que también desmoraliza al ser humano. Me da completamente igual qué piensen los hombres de mi moralidad si de esta forma puedo causarles perplejidad y lograr que comprendan que no pueden volver a hacerse esto a sí mismos, ni a sus hijos", escribió.

'Mandamientos de la era atómica'

En la obra también se incluye correspondencia con víctimas de la masacre y un texto de Anders, que hizo llegar a Eatherly en sus cartas, 'Mandamientos de la era atómica': "Tu primer pensamiento al despertar ha de ser átomo. Pues no has de comenzar el día con la ilusión de que aquello que te rodea es un mundo estable [...]".

En el prólogo escrito para la publicación de estas cartas, en 1962, el filósofo británico Bertrand Russell indicaba que "el 'caso Eatherly' no constituye solamente una terrible e infinita injusticia hacia un individiuo [en relación al internamiento forzoso], sino que simboliza también el delirio suicida de nuestra época. El único error de Eatherly fue arrepentirse de su participación relativamente inocente en la brutal masacre".

Al hilo de ese arrepentimiento y de la carga de culpabilidad que el piloto arrastró durante el resto de su vida, el escritor y periodista berlinés Robert Jungk, autor de 'Más brillante que mil soles', sobre el desarrollo de la primera bomba nuclear, apunta la existencia de un "efecto retroactivo" sobre quien emplea estas armas y recuerda que en los primeros meses de posguerra Eatherly fue el único participante en los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki que se negó a que se le honrara como a un héroe.

Lucía González | Madrid: El piloto de Hiroshima que se volvió pacifista, EL MUNDO, 27 de junio de 2010

domingo, 27 de junio de 2010

El estado del bienestar está en peligro

Los expertos advierten de que el modelo social vigente en Europa en las últimas seis décadas afronta su crisis más severa. Las recetas centradas en la austeridad dividen a los economistas

Un nuevo fantasma recorre Europa y no es precisamente el mismo del que hablaba Marx. Va en dirección contraria, provisto de tijeras, y apunta al corazón mismo del modelo social europeo desde hace al menos 60 años: el Estado del bienestar.

Tras el plan de rescate del euro lanzado en mayo, y que movilizará otros 750.000 millones de dinero público con los déficit ya disparados, en todos los países de la UE se han sucedido los recortes, siempre en la misma dirección: adelgazamiento del sector público, reducción del gasto social, rebajas en las pensiones... Y muy pocos dudan de que se trata sólo del comienzo. Vendrán más. Las recetas de recorte abrupto del gasto en plena crisis han dejado estupefacto al penúltimo premio Nobel de Economía, Paul Krugman, que esta semana insistía en Alemania que no es prioritario un ajuste que cortará en seco el crecimiento. Pero han sido asumidas en todo el continente, ahora ampliamente dominado por la derecha, que ya gobierna en todas las potencias internas (Alemania, Reino Unido, Francia, Italia) y que las considera el único salvavidas para preservar el modelo europeo.
España, muy lejos aún del nivel europeo

“Aquí hemos empezado a volver antes de llegar. Nuestro Estado del bienestar aún está lejos del nivel medio europeo y ello es consecuencia sobre todo de nuestro modelo fiscal”, opina Ignacio Zubiri, catedrático de Hacienda Pública de la Universidad del País Vasco. “¡El gran problema es que la vicepresidenta económica dice que no se puede gravar a los ricos!”, afirma. Le secunda Pablo Beramendi, de la Universidad de Oxford: “El Estado del bienestar se creó en España muy tarde, en los años ochenta, cuando los vientos internacionales ya soplaban en contra”. En su opinión, ello podría suponer ahora una ventaja si se reformara el sistema fiscal, que en relación al PIB recauda 11 puntos menos que Suecia o Dinamarca. Vicenç Navarro, catedrático de la Universitat Pompeu Fabra (UPF), es quien más ha cuantificado el déficit social español. Sus cálculos se publican periódicamente en la radiografía sobre la situación social en España que dirige desde el Programa de Políticas Públicas y Sociales de la UPF. España aparece sistemáticamente en el furgón de cola, con un gasto público en protección social equivalente al 20% del PIB, lejos de Suecia (31%), pero también de la media (26%). Sólo en prestación por desempleo se gasta por encima de la media si se mide en unidades de poder de compra por habitante.

En los islotes de izquierda como España, las medidas se han presentado como "un paréntesis", como una especie de NEP de la socialdemocracia: un paso atrás, pero para tomar impulso y salvar el Estado del bienestar. Y aquí está el meollo: ya no se discute que el Estado del bienestar está en peligro. No necesariamente por su supuesta insostenibilidad. Pero la amenaza se ha hecho real para todos. "Está clarísimo que esta crisis no tiene nada que ver con el Estado del bienestar ni con el gasto, pero todo indica que la presión sobre los gobiernos seguirá. Y una vez que han aceptado la austeridad como prioridad por encima del crecimiento, la dinámica es imparable", advierte Costas Lapavistas, economista de la Universidad de Londres. Y añade: "Vamos hacia decisiones drásticas que eran inimaginables hace apenas tres años. Es difícil creer lo que ha pasado en tan poco tiempo". Su tesis coincide con la de Vicenç Navarro, catedrático de la Universidad Pompeu Fabra y uno de los mayores expertos en el Estado del bienestar. "El mundo empresarial, incluyendo el capital financiero, ha querido reducir la protección social como una forma de debilitar el mundo del trabajo y quieren utilizar la crisis para conseguirlo", afirma.

Un 'parte' grave

Los expertos discrepan sobre las causas de la enfermedad y, por tanto, sobre las recetas a aplicar. Pero el parte es grave: los déficit y la deuda se han disparado en toda Europa, los ingresos de los estados se desploman, la financiación se encarece, el envejecimiento es imparable... Hace 50 años, el gasto en pensiones equivalía en España al 1,5% del Producto Interior Bruto. Hoy se acerca al 8,5%. Y las proyecciones para 2050 rozan ya el 15%. "El Estado del bienestar requiere ajustes, sí, pero los Tesoros están menos endeudados que en los años noventa y el modelo no tendría por qué estar en peligro", apunta Valeriano Gómez, ex secretario general de empleo del PSOE, hoy en la Fundación Ortega y Gasset. Su receta: "Hacer más eficiente el gasto público, reducir el consumo interno y no deprimir los ingresos públicos. ¡Cuánta ingenuidad había en aquello de que bajar los impuestos es de izquierdas!".

La reforma fiscal debería ser la prioridad de cualquier política que se proponga salvar el Estado del bienestar, muy por encima de la austeridad, subraya Ignacio Zubiri, catedrático de Hacienda Pública de la Universidad del País Vasco, en línea con la mayoría de expertos consultados. Zubiri es uno de los expertos en pensiones más respetado de España y nadie podría confundirlo por un radical. Está indignado: "Lo más lamentable es que se nos imponen recetas que son pura ideología, como la obsesión por bajar impuestos, reducir el déficit y dejarlo todo en manos del mercado, como si se tratara de soluciones científicas". "El Estado del bienestar en España es pequeño, pero es insostenible si no se afronta en serio una reforma fiscal que nos acerque a Europa. Estamos a más de diez puntos de países como Dinamarca y la presión recae sobre los asalariados de renta media", lamenta Zubiri. "El origen del déficit es el colapso de la recaudación y ello puede ser letal: sin el aumento de ingresos y algunas reformas en el gasto podemos ir hacia la liquidación del Estado del bienestar", remacha.

Este momento está más cerca de lo que se cree, advierte Miren Etxezarreta, catedrática emérita de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona: "Vamos hacia atrás y muy deprisa, hacia un modelo de tipo anglosajón, con un Estado del bienestar mínimo para los más pobres y todo lo demás, privado". La presión sobre las pensiones, pese a que el sistema sigue en superávit y acumula una hucha de más de 60.000 millones, es en su opinión paradigmática: "Los planes de pensiones privados son los mayores inversores del mundo; ellos son en buena parte los famosos mercados, que presionan para conseguir disponer del ahorro y que la gente tenga que pagar por lo que hoy le aporta el Estado del bienestar". En 1995, los fondos privados de pensiones en el mundo canalizaban inversiones por valor de 4,9 billones de euros. En 2009, el volumen había ascendido a 12, 7 billones, lo que representa ya el 27% del PIB mundial.

Inversores o especuladores

"A los que nos prestaron dinero les llamamos ahora especuladores", lamenta Germà Bel, catedrático de Teoría Económica de la Universitat de Barcelona. Bel sí considera que sobran las razones para "redefinir" el Estado del bienestar, con independencia de la crisis: "El sistema se ha esclerotizado, se ha vuelto injusto y a veces ineficiente por el desprecio a la excelencia. Como además no se ha mejorado la productividad y la sociedad envejece, las reformas son urgentes". "¡Menos mal que los mercados nos exigen disciplina!", añade. "De lo contrario, a lo mejor seguiríamos aún instalados en políticas miopes incompatibles con el sostenimiento del Estado del bienestar", concluye.

¿Pero no supone el Estado del bienestar una losa demasiada pesada para competir en un mundo globalizado? Al contrario, recalca Pablo Beramendi, profesor de Ciencia Política en la Universidad de Oxford. Y cita como prueba los países escandinavos: "Hay un contrato social orientado a la eficiencia económica: de un lado, apertura y flexibilidad. Del otro, la protección del Estado del bienestar, que es una parte básica de la competitividad cuando en los países mediterráneos es remedialista". El Estado del bienestar se tambalea en su cuna europea. Pero el epitafio global aún no está escrito. Quizá ni siquiera se escribirá, porque el fantasma que recorre EEUU se llama... Estado del bienestar.

Pere Rusiñol, Madrid: El estado del bienestar está en peligro, Público. 27 de junio de 2010

sábado, 26 de junio de 2010

60 años de tensión en las dos Corea

El presidente surcoreano, Lee Myung-Bak, saluda a un grupo de veteranos durante la conmemoración del 60º aniversario de la guerra de Corea.- REUTERSLos Gobiernos de Seúl y Pyongyang conmemoraron ayer el 60º aniversario del inicio de la guerra de Corea (1950-1953) con un cruce de acusaciones y advertencias, en uno de los momentos de más tensión que han vivido los dos países desde que finalizó el conflicto.

El presidente surcoreano, Lee Myung-Bak, pidió al Norte que ponga fin a sus "imprudentes provocaciones militares y tome la senda para que los 70 millones de coreanos puedan vivir juntos", y exigió que se disculpe por el hundimiento de un buque de guerra del Sur en marzo cerca de aguas en disputa entre los dos países, en el que murieron 46 marineros. Lee dejó claro, sin embargo, que "el fin último no es la confrontación militar sino la unificación pacífica". Seúl ha acusado a su vecino de haber torpedeado el navío, algo que el Norte ha negado rotundamente. El régimen de Kim Jong-il replicó que Corea del Sur y su aliado Estados Unidos pretenden provocar una nueva guerra.

Las diferencias que mantienen los dos países son profundas. Seis décadas después del inicio del conflicto, siguen culpándose mutuamente sobre quién lo desató. El enfrentamiento comenzó en las primeras horas del 25 de junio de 1950, cuando las tropas norcoreanas atacaron el Sur. La península había sido dividida en 1945, tras la derrota de Japón -que había invadido la zona- en la II Guerra Mundial. Estados Unidos y otros 15 países enviaron soldados -cinco más mandaron equipos de médicos- para ayudar a Corea del Sur, bajo el auspicio de Naciones Unidas, mientras China desplazó refuerzos para apoyar al Norte.

Cronología
  • 15 de agosto de 1945. Tras la II Guerra Mundial, Corea queda dividida en dos. El Norte, controlado por los soviéticos, y el Sur, por Estados Unidos.
  • Guerra de Corea (1950-1953). El Norte invade el Sur. Tres años después se firma un armisticio.
  • 14 de junio de 2000. Se pacta la reconciliación, el cese de las hostilidades y la reunificación de las familias separadas por la guerra.
  • 25 de abril de 2003. Corea del Norte anuncia que posee armas nucleares. Tres años más tarde, el 9 de octubre de 2006, tras una prueba nuclear del Norte, Seúl suspende el envío de ayuda de emergencia al país comunista. Al año siguiente, las delegaciones de ambas Coreas, EE UU, Rusia, Japón y China acuerdan cerrar las instalaciones nucleares de Corea del Norte a cambio de ayuda energética y económica.
  • Abril de 2009. Sube la tensión con el lanzamiento de un misil de Pyongyang que cae sobre el Pacífico.
  • 26 de marzo de 2010. El barco surcoreano Chenoan es hundido por un torpedo norcoreano, según una comisión de investigación internacional.
  • Mayo de 2010. Corea del Sur pide sanciones por el hundimiento del buque y corta sus lazos comerciales con Pyongyang, que despliega su Ejército y amenaza con guerra.

La visión de Pyongyang del conflicto, que denomina Guerra de Liberación de la Madre Patria, es muy diferente. La agencia estatal KCNA difundió el martes un artículo titulado Estados Unidos, provocador de la guerra de Corea, en el que se aseguraba que el enfrentamiento fue iniciado por Washington con un ataque sorpresa. La contienda, que causó unos tres millones de muertos, concluyó con un armisticio, que nunca se convirtió en tratado de paz. Coincidiendo con el aniversario, Corea del Norte lanzó un aviso de no navegación en un área del mar Amarillo, en la costa occidental de la península, entre los días 19 y 27 de junio, que, según dijo Seúl, forma parte de unas maniobras rutinarias. Pyongyang ha realizado la misma advertencia en el pasado antes de probar misiles de corto alcance.

Corea del Sur ha pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que adopte una resolución contra Pyongyang por el hundimiento del navío, después de que un equipo internacional de investigadores concluyera que fue hundido por un torpedo norcoreano. China, miembro permanente del consejo, es reacia por las consecuencias que pueda tener sobre la estabilidad en la región. Corea del Norte ha amenazado con la guerra si el Sur y el Consejo de Seguridad le penalizan. El Gobierno de Seúl conmemoró el aniversario con una ceremonia en la que Lee Myung-Bak entregó placas de reconocimiento a representantes de países que participaron en la contienda. Entre los asistentes, había veteranos de guerra extranjeros y soldados estadounidenses. Washington mantiene un dispositivo de 25.800 militares en Corea del Sur como disuasión contra el Norte.

Los analistas creen que los movimientos militares de Pyongyang van encaminados a ensalzar la figura política de Kim Jong-il y reforzar su posición negociadora con la comunidad internacional, que intenta en vano desde hace meses que vuelva a la mesa negociadora sobre el desmantelamiento de su programa atómico.Kim Jong-il, que sufrió una apoplejía en el verano de 2008, está intentando consolidar la futura sucesión de la dinastía comunista. A principios de mes, su cuñado Jang Song-thaek fue nombrado vicepresidente de la poderosa Comisión Nacional de Defensa, organismo responsable del Ejército. Hace poco más de un año, se supo que el llamado Querido Líder había designado heredero al poder al tercero y menor de sus hijos, Kim Jong-un, de 27 años. Según los analistas, Jang Song-thaek tomaría las riendas de Corea del Norte si Kim Jong-il falleciera antes de que su hijo pudiera sucederle.

El contexto que marcó ayer las conmemoraciones es muy diferente del que hubo hace 10 años, durante el 50º aniversario, días después de celebrarse en Pyongyang la primera cumbre de la historia entre los dos países. Las relaciones navegan ahora en aguas turbulentas, con el hundimiento del buque surcoreano atravesado delante de una futura reanudación de las negociaciones para el desarme nuclear del Norte.

José Reinoso, Pekín: 60 años de tensión en las dos Coreas, EL PAÍS, 26 de junio de 2010

Retiran en Georgia una estatua de Stalin de su ciudad natal

La estatua fue retirada durante la noche sin previo aviso. La estatua del dictador Iósif Stalin fue retirada la pasada noche de la plaza central de su ciudad natal, Gori, cerca de la separatista Osetia del Norte, a 70 kilómetros al oeste de la capital georgiana. El monumento de Stalin fue desmontado durante la noche sin aviso previo para ser trasladado al patio de la casa-museo del líder soviético situada a varios centenares de metros de la plaza central, informó la televisión. En torno al mediodía, varios medios dieron cuenta de un mitin de protesta espontáneo de varias decenas de habitantes de Gori, y reporteros del canal de televisión local Trialeti denunciaron que la policía se incautó de una cinta de vídeo grabada durante la concentración. Las autoridades informaron de que la estatua, instalada en el centro urbano en 1952, será sustituida por un monumento a los caídos en la guerra ruso-geogiana de agosto de 2008 por el control de Osetia del Sur.

"No puede ser considerado georgiano"

Según datos oficiales, 370 georgianos, entre civiles y militares, murieron durante los cinco días de cruenta guerra con Rusia, mientras las pérdidas económicas ascendieron a mil millones de dólares. El Gobierno georgiano anunció en octubre de 2008 su decisión de retirar la estatua del líder comunista del centro de Gori, que el entonces primer ministro, Vladímir Gurguenidze, calificó de una iniciativa "muy oportuna". "Por sus acciones, Stalin no puede ser considerado georgiano. Stalin es uno de los fundadores de la URSS, verdugo de millones de personas, incluidos georgianos", aseguró a su vez Gueorgui Baramidze, viceprimer ministro primero, autor del proyecto. Durante una reunión del gabinete de ministros, Baramidze declaró que "sólo por el hecho de ser georgiano étnico no puede haber una estatua de un verdugo en el centro de la ciudad de Gori".

Inicialmente, las autoridades se proponían retirar la estatua antes del 21 de diciembre de 2009, cuando se cumplía el 130 aniversario del dictador, pero después decidieron no irritar a sus admiradores, que siguen adorándolo como a un gran estadista y el georgiano más famoso del mundo. Hace varios años, comunistas y nostálgicos de la URSS pidieron trasladar a Georgia la tumba de Stalin, actualmente en la Plaza Roja de Moscú, pero la iniciativa no fructificó. Iósif Dzhugashvili, de apodo revolucionario Stalin, nació en Gori en 1879 y vivió en esa ciudad hasta la edad de 16 años, cuando viajó a Tiflis para ingresar en un seminario. El museo fue abierto en 1937 en la casa donde había nacido el dictador, y en 1958 se construyó un segundo edificio de dos plantas que alberga los principales fondos, mientras en el patio permanece aparcado el "vagón especial" que utilizaba Stalin en sus desplazamientos por ferrocarril.

EFE, Tiflis: Retiran en Georgia una estatua de Stalin de su ciudad natal, Público, 25 de junio de 2010

martes, 22 de junio de 2010

El ancestro de 'Lucy' ya andaba de pie

Los huesos de un nuevo australopiteco desenterrado en Etiopía acaban de corroborar que estos posibles antepasados del hombre ya andaban siempre sobre dos piernas hace 3,58 millones de años. Así lo creen los investigadores de EEUU y Etiopía que en 2005 hallaron el esqueleto más antiguo y completo de un Australopithecus afarensis adulto, al que han llamado Kadanumu. Significa hombre grande en afar, la lengua que se habla en la región al norte de Etiopía donde se encontraron sus restos. "Esta especie ya no mostraba rasgos físicos de un animal que trepa por los árboles y se cuelga de ellos como el chimpancé", explica a Público Owen Lovejoy, investigador del Museo de Historia Natural de Cleveland (EEUU) y autor principal de la descripción de Kadanumu en PNAS.

Restos de Kadanumu

Se trata del espécimen más completo desde Lucy, una afarensis encontrada en 1974 en Hadar, una localidad al sur de la región de Afar. Lucy fue un hallazgo histórico, pues conservaba parte de su cráneo. El esqueleto permitió determinar su sexo y que presentaba la estatura de una niña de 7 años actual. Sus descubridores concluyeron que, hace 3,2 millones de años, los afarensis tenían una capacidad cerebral mucho menor a la del hombre, pero ya andaban la mayor parte del tiempo sobre dos piernas. Las pruebas no bastaron a otros expertos, que opinaron que Lucy era más simiesca y probablemente no estaba equipada para vivir siempre sobre dos extremidades. Otra incógnita era la estatura de los afarensis adultos y cómo de desarrollado tenían su cerebro.

El esqueleto de Kadanumu responde una de esas preguntas y deja la otra en suspenso. Los investigadores no han encontrado ni rastro de su cráneo. Sí han recuperado suficientes huesos de sus extremidades y tórax, incluidas su clavícula y algunas vértebras, que permiten concluir que los afarensis estaban equipados para andar tan bien sobre dos piernas como lo hace un sapiens. "Sus hombros y caja torácica nos muestran que eran más parecidos a los humanos de lo que pensábamos", explica Lovejoy. Una de las piezas clave de este nuevo esqueleto es su omóplato, pues los restos de Lucy carecían de esta pieza. Comparada con la de un gorila, un chimpancé y un humano moderno, la pieza es más similar a la de esta última especie. Su cadera refuerza el bipedalismo e indica que un afarensis similar a Kadanumu fue el que dejó las famosas pisadas fósiles de Laetoli, en Tanzania, que dan fe de bipedalismo hace unos 3,5 millones de años. Aunque los expertos no han encontrado ni rastro de los pies ni de las manos de Kadanumu, estiman que su estatura estuvo entre 1,52 y 1,67 metros, mucho más de lo que medía Lucy, explica Lovejoy.

Los expertos concluyen en su artículo que el bipedalismo apareció muy temprano y que su diseño fisiológico permaneció prácticamente intacto durante millones de años, dadas las similitudes de la cadera de Kadanumu con la de un Homo erectus que vivió en Etiopía 2,2 millones de años después. "Los resultados muestran que afarensis ya estaba muy avanzado en el camino evolutivo que llevaría a otros homínidos", opina Enrique Baquedano, director del Museo Arqueológico Regional de Madrid y excavador de la garganta de Olduvai en Tanzania, otra de las cunas de la familia humana.

Nuño Domínguez, Madrid: El ancestro de 'Lucy' ya andaba de pie, Público, 21 de junio de 2010

domingo, 20 de junio de 2010

Paralelo 38, la delgada línea verde

La naturaleza ha encontrado un lugar en el que refugiarse del ataque del ser humano. Es la zona desmilitarizada de Corea, una franja que separa a dos hermanas en guerra y sirve para que vivan en paz especies en peligro

Prismáticos en el observatorio de Dorasan, en Corea del Sur, dirigidos hacia la zona desmilitarizada.- CHUNG SUNG-JUEl paralelo 38 no es más que una de esas líneas imaginarias que, con la ayuda de los meridianos, permiten al ser humano ubicar un punto en el globo terráqueo. Pero, a su paso por la península de Corea, cobra vida y deja de ser un concepto sin consecuencias. Se convierte en una muralla infranqueable más propia de otros tiempos, en un desubicado trozo del Telón de Acero, que separa a dos hermanas técnicamente en guerra.

Al norte, el régimen estalinista de Kim Jong-il utiliza la hoz y el martillo para asegurarse de que los 23,5 millones de habitantes no sacan su cabeza fuera del mayor agujero negro político del planeta, cuya miseria económica y ambición militar han llevado a la continua deforestación del territorio. Al sur, el neoliberalismo más feroz ha creado uno de los tigres asiáticos que ruge con más fuerza y, en un cuarto de siglo, ha convertido a un país que por sus estadísticas podría estar en el África subsahariana, en un rival económico de Europa y Japón. A costa de un brutal proceso de urbanización y una polución en aumento constante que han llevado a la desaparición de casi el 40% de los mamíferos y el 60% de los anfibios.

Entre ambos países, no obstante, el paralelo 38 ha dibujado un curioso anacronismo. Sus 248 kilómetros de longitud representan la frontera con mayor presencia militar del mundo, considerada por la mayoría de los analistas militares como uno de los pocos elementos desestabilizadores capaces de enfrentar en un conflicto bélico a las dos grandes superpotencias: China, aliado tradicional de República Popular Democrática de Corea, y Estados Unidos, un país comprometido con la defensa de la República de Corea.

Ha despertado esos temores la reciente crisis de la corbeta surcoreana Cheonan, hundida por Corea del Norte el pasado 26 de marzo, según una investigación internacional, y que provocó la muerte de medio centenar de marineros. El zafarrancho de combate sonó en mayo a ambos lados de la frontera, y los dos ejércitos sacaron a relucir su artillería pesada en el mar Amarillo. No obstante, en medio de este bombardeo preventivo ha existido un lugar en el que solo se escuchaba el canto de las grullas: la Zona Desmilitarizada (DMZ, del inglés Demilitarized Zone), una franja de cuatro kilómetros de ancho que da cuerpo al paralelo 38 y en la que el ser humano no ha puesto un pie en las últimas seis décadas.

Las alambradas y las torretas de vigilancia que representan el odio humano han sido, curiosamente, las que han creado un paraíso natural sin parangón en la Tierra. Es la delgada línea verde en la que se refugian algunos de los últimos especímenes de animales que ya no pueden verse en ninguna otra parte. Aunque no existe ningún estudio realizado in situ, el Programa Medioambiental de Naciones Unidas (UNEP) y varias ONG aseguran que aquí perviven todavía el leopardo del Amur, del que solo queda una treintena de ejemplares en Rusia; la grulla de coronilla roja, de la que se estima que un tercio sobrevive en la DMZ; el ciervo de agua chino, y animales en peligro de extinción como linces, osos y focas, entre muchos otros. En total, los científicos coreanos cifran en 2.700 el número de especies que habitan aquí, de las cuales 67 ya no se encuentran en otro lugar.

Con los prismáticos ubicados en el observatorio de Dorasan, el último bastión surcoreano, convertido en un búnker que atrae al año a más de un millón de visitantes que buscan sentir el último espasmo de la guerra fría, no cuesta imaginar la vida en este edén natural. La frontera aparece como un inmenso bosque acotado por dos franjas ocres en las que se erige la muralla de alambre de espino. La mayoría de los visitantes, sin embargo, no buscan especies raras, y enfocan los binoculares hacia el "otro lado", donde es visible la bandera con el mástil más alto del mundo. Son 160 metros que sobresalen entre los edificios desnudos de Kijong-dong, una ciudad fantasma de cartón piedra construida por el régimen de Pyongyang para tratar de impresionar a Seúl con un bienestar ficticio.

No obstante, en el museo que se esconde bajo la fortificación decorada con pintura de camuflaje, los guías de este insólito tour "para descubrir el dolor de una nación dividida" sí que hacen hincapié en el valor ecológico de la Zona Desmilitarizada. Entre las maquetas de los complejos militares y las muestras del equipamiento bélico de los soldados, una pequeña sala da respuesta a una pregunta que pocos se hacen hasta introducirse en su interior. ¿Cómo sería la vida si el ser humano desapareciera del planeta? "El experimento ya se ha hecho y está frente a todos ustedes", explica Kim Youseon, uno de los encargados de la visita. "Es el lado positivo de la Guerra de Corea, porque, sin ella, la DMZ habría sido sobreexplotada como cualquier otro lugar en la península".

Hay que remontarse a 1953 para dar con la última ocasión en la que un ser humano pisó la DMZ. Ese año se puso punto y seguido a la guerra de tres años que enfrentó a comunistas y capitalistas en esta pequeña, pero extremadamente conflictiva, protuberancia de Asia. Las dos Coreas firmaron un armisticio por el que pausaban las hostilidades, aunque no ponían fin a la guerra, y sellaban el acuerdo por el que se aceptaba la partición por el paralelo 38 de la nación coreana para dar como resultado dos Estados de sistemas opuestos entre los que se erigiría la DMZ y, en el caso de Corea del Sur, también una Zona de Control Civil cuya baja densidad de población serviría como primera alarma, y frente avanzado, en caso de invasión.

Pero es necesario echar la mirada un lustro más atrás para entender las razones que llevaron a este acuerdo. El fin de la II Guerra Mundial supuso también el final de la brutal expansión imperialista japonesa, tanto en Corea como en otros países del continente. La rendición anunciada por el emperador nipón sonó a canto de libertad e independencia. Pero las grandes potencias mundiales no tardaron en cercenar la esperanza.

En 1948, Estados Unidos, la Unión Soviética y el Reino Unido acordaron la división temporal de la península por el paralelo 38, pero dos años más tarde, tropas norcoreanas dieron comienzo a la invasión del sur con el beneplácito de soviéticos y chinos. Se materializó entonces la peor de las pesadillas. Estados Unidos entró en acción y la Organización de Naciones Unidas aprobó una resolución que legalizaba la respuesta americana. No obstante, las tropas estadounidenses no fueron capaces de contener a los comunistas, y solo la intervención del general MacArthur consiguió dar un vuelco a la situación cuando sus militares estaban ya casi fuera del mapa.

Con la renovada estrategia militar, la enseña de las barras y estrellas consiguió arrinconar en el norte al ejército norcoreano, que entonces pidió auxilio a sus vecinos chinos. Vuelta a empezar. En los tres años que duró la guerra de Corea, que no hizo sino devolver a ambos países a la casilla de salida establecida en 1948, Seúl cambió de manos en cuatro ocasiones y la actual Zona Desmilitarizada quedó plagada de minas y de otros artefactos explosivos que todavía suponen el principal riesgo para los animales que la habitan hoy, aunque los expertos consideran que la mayoría no tiene peso suficiente como para hacerlos detonar y que, posiblemente, casi todos hayan quedado inutilizados con el tiempo.

Aunque parezca contradictorio, la mayor amenaza que se cierne sobre los 1.000 kilómetros cuadrados de esta imprevista reserva natural es la posibilidad de que algún día las dos Coreas sellen la paz. El objetivo último de ambos Gobiernos es la reunificación de la península, algo que conllevaría el desmantelamiento de la DMZ y la libre urbanización de la Zona de Control Civil, donde el ecosistema todavía se mantiene relativamente indemne.

Organizaciones como DMZ Forum trabajan para conseguir que la zona sea catalogada como sistema coreano de biorreserva de paz, una iniciativa lanzada en 1994 que busca promover una aspiración casi utópica: que no sea el modelo de desarrollo actual el que se coma la Zona Desmilitarizada, sino que los valores preservados en esta franja sean los que sirvan de ejemplo para el desarrollo económico del futuro país unificado. Ello incluiría el establecimiento de un parque natural que podría ser explotado como destino de ecoturismo. Después de haber retirado el millón de artefactos explosivos que lo salpican, claro.

Para ello, DMZ Forum ha redactado una hoja de ruta que incluye "el estudio científico de cómo la naturaleza se recupera ante la ausencia de interferencia humana, la reintroducción de especies vegetales y animales en el resto del territorio y la puesta en marcha de un proyecto medioambiental conjunto que beneficie y sirva para fortalecer la paz entre ambos países".

Pero, hasta entonces, los habitantes de la Zona Desmilitarizada tendrán que continuar luchando por su supervivencia. Porque los seres humanos no pueden atacarlos, pero sí son vulnerables a las consecuencias de su forma de vida. "Al fin y al cabo, la DMZ no es una isla, y allí también afectan la contaminación atmosférica y la polución del agua", comenta Kim.

La Federación Coreana de los Movimientos Medioambientales (KFEM) le da la razón. A ambos lados de la frontera, diferentes iniciativas empresariales han provocado un aumento en la densidad de población y en los contaminantes de la tierra. En Paju, situado solo cinco kilómetros al sur de la Zona Desmilitarizada, el número de habitantes se ha doblado desde 2003 hasta superar los 300.000.

Al otro lado, a solo diez kilómetros de la alambrada, el complejo industrial de Kaesong es uno de los principales núcleos económicos de Corea del Norte. Aquí, un centenar de empresas, sobre todo surcoreanas, proporcionan empleo a más de 40.000 privilegiados trabajadores que forman parte del primer experimento capitalista del dictador Kim Jong-il. El objetivo final era el establecimiento de una Zona Económica Especial, al estilo de las que iniciaron el cambio en China, que empleara a más de medio millón de norcoreanos en 2012, pero las tensiones entre ambos países han frenado el proyecto y, según KFEM, han supuesto un balón de oxígeno para el paraíso natural de la DMZ.

Los integrantes del tour prestan poca atención a la información sobre las plantas que han sobrevivido a su extinción en el paralelo 38. Hay expectación por ver el lugar en el que la línea se reduce a su mínima expresión. En Panmunjeom, la frontera no es más que un escalón de cemento de unos 20 centímetros de alto. Soldados de ambas Coreas se miran, como escrutando sus pensamientos, en un escenario en el que parece como si se rodara una película histórica. Pero la tensión es aquí real y actual.

En el campamento Bonifas, el principal edificio de la Zona de Seguridad Compartida, se celebran las conversaciones de paz y se firman acuerdos. Salvo en las escasas ocasiones en las que se celebran reuniones diplomáticas, y en aquellos momentos en los que la tensión entre ambas Coreas escala hasta niveles peligrosos, los visitantes pueden recorrer las salas del complejo. Reina el silencio. El paralelo 38 es aquí reflejo de un infierno humano. Solo se escuchan el eco de las órdenes de los oficiales y los golpes secos de los fusiles. Aunque no llegue hasta aquí su sonido, no muy lejos canta la rara grulla de coronilla roja.

Zigor Aldana, Seúl: La delgada línea verde, EL PAÍS, 19 de junio de 2010

La lista de Franco para el Holocausto

El régimen franquista ordenó en 1941 a los gobernadores civiles elaborar una lista de los judíos que vivían en España. El censo, que incluía los nombres, datos laborales, ideológicos y personales de 6.000 judíos, fue, presumiblemente, entregado a Himmler. Los nazis lo manejaron en sus planes para la solución final. Cuando la caída de Hitler era ya un hecho, las autoridades franquistas intentaron borrar todos los indicios de su colaboración en el Holocausto. EL PAÍS ha reconstruido esta historia y muestra el documento que prueba la orden antisemita de Franco
Al final de la II Guerra Mundial, el régimen de Franco intentó con relativo éxito confundir a la opinión pública mundial con la fábula de que había contribuido a la salvación de miles de judíos del afán exterminador nazi. No solo era falso lo que la propaganda franquista pretendía demostrar. En la España del dictador hubo la tentación de contribuir a acabar con el "problema judío" en Europa.

La paciente labor de un periodista judío, Jacobo Israel Garzón, ha conseguido que aflorara el único documento conocido sobre el asunto, conservado por obra de la casualidad en el Archivo Histórico Nacional, y proveniente del Gobierno Civil de Zaragoza. Lo publicó en la revista Raíces. A partir de ese trabajo, EL PAÍS ha continuado la indagación y ha reconstruido la historia completa de la frustrada colaboración con el Holocausto. Quiénes fueron sus protagonistas y sus cómplices. Una historia que cambia la Historia.

El 13 de mayo de 1941, todos los gobernadores civiles españoles reciben una circular remitida el día 5 por la Dirección General de Seguridad. Se les ordena que envíen a la central informes individuales de "los israelitas nacionales y extranjeros afincados en esa provincia (...) indicando su filiación personal y político-social, medios de vida, actividades comerciales, situación actual, grado de peligrosidad, conceptuación policial". La orden la firma José Finat Escrivá de Romaní, conde de Mayalde, el último día de su permanencia en el cargo, porque va a ser relevado por el coronel Galarza. De ese puesto va a saltar en pocos días al de embajador de la España de Franco en Berlín.

El conde es un personaje refinado y culto, y muy amigo de Ramón Serrano Suñer, el hombre fuerte del régimen [fue ministro de Interior y Asuntos Exteriores], que es quien le va dando los distintos cargos que ostenta. Ha prestado grandes servicios a Serrano y a Franco, como el de organizar a los policías que, en connivencia con el embajador Lequerica y la Gestapo, utilizando a un siniestro policía de apellido Urraca, consiguió traer a Companys y Zugazagoitia a España para sufrir una burla de juicio y ser fusilados.

José Finat hizo buenas migas con Himmler cuando este visitó España en octubre de 1940. Himmler pudo asistir a un espectáculo que le pareció cruel: una corrida de toros en Las Ventas. En esos días, ambos pusieron al día una vieja colaboración firmada por el general Severiano Martínez Anido en 1938. Gracias a ese acuerdo, la policía política alemana goza de status diplomático en España, y puede vigilar a sus anchas a los treinta mil alemanes que viven aquí.

Dentro de poco más de un mes, Finat va a ocupar su cargo de embajador en Berlín. Allí podrá entregar en persona a Himmler sus listas de judíos. Si España entra en la guerra, serán un buen regalo para los nazis. Antes va a tener tiempo suficiente para dar una paliza y emplumar por maricón a un cantante, Miguel de Molina. Le ayudará el falangista Sancho Dávila, primo del fundador del partido fascista.

El objetivo del Archivo Judaico no consiste en defender al régimen de la posible acción subversiva que puedan realizar los refugiados que pasan por España huyendo de la persecución nazi. Esos son conducidos directamente a Portugal para que se marchen a Estados Unidos, o internados en el campo de concentración de Miranda de Ebro hasta que se sepa qué hacer con ellos. De lo que se trata, sobre todo, es de tener controlados a los judíos españoles de origen sefardí:

"Las personas objeto de la medida que le encomiendo han de ser principalmente aquellas de origen español designadas con el nombre de sefardíes, puesto que por su adaptación al ambiente y similitud con nuestro temperamento poseen mayores garantías de ocultar su origen y hasta pasar desapercibidas sin posibilidad alguna de coartar el alcance de fáciles manejos perturbadores".

El trabajo no va a ser fácil por esa capacidad de adaptación que tienen los judíos. Sobre todo en lugares que no sean como Barcelona, Baleares y Marruecos, donde había antes de la guerra "comunidades, sinagogas y colegios especiales", y eso permite una mayor facilidad de localización.

La circular no oculta la urgencia de la acción. Hay que proteger al Nuevo Estado de la posible actuación de estos individuos, que son "peligrosos".

El coronel Valentín Galarza está poniendo patas arriba el ministerio que le ha dejado Serrano Suñer, infestado de falangistas revolucionarios. Pero no va a destrozar toda la obra de su antecesor. El Archivo Judaico se va a seguir completando con carácter de urgencia al principio y con metódica seriedad después.

¿No son acaso los judíos y los masones los enemigos fundamentales del Nuevo Estado?

Cuando haya pasado el tiempo, el Archivo Judaico será ocultado y sistemáticamente destruido, como toda la documentación comprometedora para el régimen franquista en relación con la persecución antisemita realizada en los años cuarenta. Cuando deje de ser urgente tener listas completas de israelitas y haya que justificar la patraña de que el régimen surgido del 18 de julio ayudó en todo lo posible para que se salvaran muchos judíos de la persecución nazi.

En mayo de 1941, cuando se envía la circular, resulta muy significativa la desaparición de las guardias de falangistas de la puerta del Ministerio de la Gobernación. Ya no se trata de que la represión la lleve la Falange por su cuenta, como si fuera un poder autónomo del Estado. Se trata de que el Nuevo Estado asume comportamientos que le identifican con los de la Alemania nazi, pero mediante las instituciones tradicionales, o sea, en este caso, la Policía y la Guardia Civil. Eso sí, "auxiliados por elementos de absoluta garantía".

Esos elementos son falangistas entusiastas de la represión, que hay muchos. Porque continúa en funcionamiento la Delegación Nacional de Información e Investigación, con sedes en muchos municipios españoles. Hay más de tres mil agentes del partido repartidos por toda la geografía nacional, que elaboran sin descanso expedientes sobre sospechosos. En el año anterior han escrito más de ochocientos mil informes y han elaborado fichas sobre más de cinco millones de ciudadanos. Los miembros de las delegaciones hacen informes constantes sobre la situación política en cada lugar, sobre el estado de la opinión pública, y sobre los antecedentes políticos de cualquier ciudadano que aspira a un puesto de trabajo. Y tienen el privilegio de participar en interrogatorios policiales y torturas en comisarías o cuartelillos.

A veces, fuera de las dependencias judiciales. El ricino y las palizas callejeras están a la orden del día.

Con el cambio de destino del conde de Mayalde, los falangistas dejan de ser los que encabezan este tipo de investigaciones, pero están. Siguen estando.

Los investigados para el Archivo Judaico no son gente de especial relevancia. Salvo en algún caso, como el del escritor Samuel Ros, amigo íntimo del revolucionario Dionisio Ridruejo, cuya condición de judío levantará las inquietudes de los funcionarios nazis instalados en España. Se da la circunstancia de que Ridruejo es también muy amigo del conde, con el que va a compartir muchas jornadas en Berlín durante su discontinua presencia en la División Azul, el contingente español que va a marchar a Rusia a luchar contra el comunismo a las órdenes del general Agustín Muñoz Grandes.

Los hombres de Himmler, a los que el conde de Mayalde ha dado el estatus oficial para que se muevan con soltura por el país, reclaman a la Policía española que les dé detalles sobre las actividades de Samuel Ros. Incluso se atreven a protestar porque se le permita escribir en medios oficiales como el diario falangista Arriba.

Otra de las circunstancias llamativas de la circular es que rompe con el antijudaísmo clásico de la católica España. Para la Iglesia, y por tanto para el régimen nacional católico amparado por los cardenales Pla i Deniel y Gomà, un judío deja de serlo si se convierte al catolicismo. Los nazis consideran que se trata de una raza, y el conde de Mayalde expresa claramente su concepción próxima a la de los seguidores de Hitler: los sefardíes, que por "su adaptación al ambiente y su similitud con nuestro temperamento poseen mayores garantías de ocultar su origen". Hay un temperamento español y un origen judío.

La fecha en que se emite la circular tampoco es casual. En España se debate desde hace meses la posibilidad de que el país entre en guerra al lado de Alemania. Y los más furibundos partidarios de esta opción son los falangistas revolucionarios, los nacionalsindicalistas que admiran a Hitler y comprenden su política de liquidación del judaísmo.

En Francia, las autoridades de Vichy han puesto en marcha, sin necesidad de que los ocupantes alemanes se lo pidan, un Estatuto Judío que incluye un censo. Ya hay muchos miles de judíos franceses o apátridas recluidos en campos de concentración en la zona de Vichy y en la zona ocupada. En todos ellos la autoridad le corresponde a la policía francesa. De esos campos saldrán los trenes de la muerte que conducirán a casi todos los judíos franceses al exterminio en Auschwitz.

El más importante está al lado de París, en una localidad llamada Drancy, donde catorce sefardíes españoles han sido recluidos. Un diplomático llamado Bernardo Rolland de Miota, cónsul general en París, intenta, contra las órdenes del embajador Lequerica y del ministro Serrano Súñer, salvarles. No lo consigue, aunque sí puede actuar a favor de otros dos mil que reciben protección de su consulado. Serrano Suñer le hará pagar por su desobediencia destinándole a un oscuro puesto africano. Será declarado por la Fundación Wallenberg "justo entre las naciones", un título al que se harán acreedores otros diplomáticos españoles, como Sebastián de Romero, Eduardo Propper, Julio Palencia, Ángel Sanz Briz o Carmen Schrader.

»LA REUNIÓN DE WANNSEE. A las afueras de Berlín hay un plácido barrio de casas residenciales donde muchos berlineses de posición económica acomodada pasan los fines de semana. Antes para alejarse del estruendo de la gran urbe. Ahora para eludir la incomodidad de las alarmas aéreas. El barrio se llama Wannsee, y está construido a las orillas del lago del mismo nombre.

Allí se solazan y descansan los responsables de la Seguridad del Estado hitleriano. Los jefes de los Eisantzgruppen, estresados, se recuperan del pesado trabajo de matar en masa a tantos judíos, a tantos partisanos y comisarios bolcheviques. Lo hacen en una casa adquirida por la Seguridad del Reich, que dirige un asesino en masa llamado Reinhardt Heydrich.

Heydrich, el virtuoso violinista que, a las órdenes de Himmler, desarrolla la matanza de los judíos, ha hecho balance, y este no es nada bueno. Con gran esfuerzo y un enorme gasto de munición y recursos, se ha conseguido matar solo a un millón de judíos en números redondos, de los más de once que se calcula que están en los territorios del Reich o en las zonas conquistadas. Y lo que no cabe ya, a la vista de la reacción del Ejército soviético, que ha detenido la ofensiva sobre Moscú y Leningrado, es pensar en expulsar a todos los hebreos hasta los montes Urales para que allí se extingan.

Hasta octubre de 1941, se ha conseguido que quinientos treinta y siete mil judíos se marcharan de los territorios del Reich. Unos quinientos mil, de Alemania y Austria; los treinta mil restantes, de Bohemia y Moravia. Pero esta política está realmente acabada, porque trae muchos problemas, en plena guerra, negociar transportes, destinos e itinerarios.

Mientras a los de las repúblicas bálticas se les mata en bosques o se les enrola por la fuerza en destacamentos de trabajo, en Varsovia sigue habiendo un gueto poblado por decenas de millares de judíos polacos que absorben recursos alimenticios, que obligan a dedicar numerosas tropas a controlarles. No es barato liquidar el problema judío. Los responsables de cada área ocupada se las ven y se las desean para cumplir con una orden muy vaga, la de que cada uno se las tiene que arreglar para matar a sus judíos. Pero eso no es fácil. Hans Frank, el gobernador general de Polonia, ha mostrado su desesperación hace pocas semanas: "No podemos fusilar a esos tres millones y medio de judíos, no podemos envenenarles, pero tenemos que ser capaces de dar pasos para encontrar una forma de llegar al éxito en el exterminio".

Es 20 de enero y en el palacio de Wannsee, junto al lago de aguas cristalinas, Heydrich ha reunido a los quince mejores expertos en matanzas porque ha recibido la orden de poner de una vez en marcha la "solución final" de ese problema. Hay que tomarse en serio el asunto, y ordenar los métodos, convertir el empeño en un sistema industrial eficiente en resultados concretos y en términos de economía. Y la consigna debe carecer de elementos que permitan la duda. A partir de ahora está claro que lo que procede es matar a todos, absolutamente todos, los judíos que se encuentran en territorios del Reich o en zonas conquistadas. No solo en esas áreas, sino también en el resto de Europa. Porque quedan muchos judíos en países rendidos o aliados. En casi ninguno de ellos se va a encontrar ningún problema para aplicar la solución. Sí en Italia, que es un aliado dubitativo en este asunto, pero no hay quejas sobre la actitud de Francia.

Hitler ha hecho hincapié varias veces en su "profecía" de que, si se produjera una nueva guerra mundial, los judíos desaparecerían de la faz de la tierra. Ahora ya no puede haber vacilaciones. Ya hay una guerra mundial desde que Estados Unidos se han enrolado en ella. Dentro de diez días, en un sitio público, el Sportpalas de Berlín, el Führer va a insistir en ello: "Esta guerra no tendrá un final como imaginan los judíos, con el exterminio de los pueblos arios de Europa, sino que el resultado de esta guerra será la aniquilación de la judería. Por primera vez, la antigua ley judía será aplicada ahora: ojo por ojo y diente por diente".

No hay constancia documental de que en Wannsee se hable de España. Se hace notar, simplemente, que allí hay seis mil judíos. Pero su destino está claro, para cuando se pueda atender la relación con este país. Lo seis mil están censados por algún organismo del Gobierno, que ha pasado nota a los representantes alemanes en la Embajada de Madrid. El censo que inició el 5 de mayo de 1941 José Finat, conde de Mayalde, ahora embajador en Berlín. Están todos localizados.

Una compleja serie de razones impedirá que España entre en la guerra al lado de Alemania. Eso evitará que los nombres incluidos en el Archivo Judaico pasen a formar parte de los listados de Auschwitz.

A finales de 1945, los archivos de los ministerios de Gobernación y de Asuntos Exteriores serán expurgados para que no quede nada que demuestre que la mayor actitud de piedad de Franco hacia los judíos fue dejar pasar a algunos, o soportar en ocasiones la acción individual de los pocos diplomáticos que se la jugaron por salvar vidas humanas.

El Archivo Judaico habría sido un hermoso regalo para Hitler. Su conservación, una repugnante prueba de lo que los falangistas de Ramón Serrano Suñer pretendían hacer con los judíos españoles.

El cinismo franquista llegó al extremo cuando tuvo que negociar con los aliados vencedores en la guerra la liquidación de las deudas con Alemania. La delegación española se atrevió, ante el escándalo de los representantes aliados, a pedir compensación por los daños patrimoniales causados por los nazis a los sefardíes de Tesalónica. El representante inglés McCombe tuvo que recordar en la reunión que España jamás había protestado por la persecución nazi contra sus compatriotas.

Jorge M. Reverte, La lista de Franco para el Holocausto, EL PAÍS, 20 de junio de 2010

viernes, 18 de junio de 2010

Atapuerca: Regreso al hogar del antecesor

La radiografía de 'Jimena'.El 15 de junio de 2010 comienzó la nueva temporada de excavación en los yacimientos de Atapuerca durante la cual los expertos intentarán encontrar nuevos restos de Homo antecessor, el primer humano que pobló Europa y uno de los más controvertidos debido a su gusto por el canibalismo.

Uno de los últimos hallazgos del equipo ha sido la mandíbula de Jimena. Así han bautizado los responsables de la excavación a una niña de unos cuatro años que vivió en esta sierra de Burgos hace 800.000 años y cuyos datos se publican hoy en PNAS. En 2006, el equipo liderado por José María Bermúdez de Castro, Juan Luis Arsuaga y Eduald Carbonell encontró partes de la mandíbula de Jimena en la Gran Dolina, un yacimiento en el que la mayoría de restos pertenecen a niños que habían perecido víctimas del canibalismo. El fósil de esta pequeña antecessor aún conserva dientes de leche, el primer molar permanente y otros dientes aún por salir. "Es como una escena congelada de la niñez de este homínido", explica a Público María Martinón-Torres, investigadora del Centro Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (Cenieh) y coautora del estudio sobre Jimena.

José María Bermúdez. Codirector de Atapuerca: "Sólo descansamos en sábado"

1. ¿Cómo es la vida en Atapuerca durante las excavaciones?

Sólo tenemos el sábado de descanso, aunque los directores de la excavación no solemos descansar ni siquiera ese día. Tenemos muchas visitas y hemos de atenderlas.

2. ¿Qué es lo peor y lo mejor de este trabajo?

Lo peor es el calor y el frío. En Burgos, las temperaturas son muy extremas entre el día y la noche. Las olas de calor son insoportables, pero también las mañanas gélidas, cuando "sale el norte" , como aquí se dice. Lo mejor, los descubrimientos, que animan a todo el mundo y hacen subir mucho la moral.

3. ¿Por qué han llamado Jimena' a su nuevo hallazgo?

Porque nos habían dicho que nombres anteriores, como Miguelón [el cráneo de Homo heidelbergensis] o Excálibur [un hacha bifaz] no tenían ninguna relación con Burgos.

4. ¿Qué importancia tiene el fósil?

Mucha, porque indica que el antecessor ya estaba haciendo la transición hacia un desarrollo más lento y, por tanto, con un cráneo mayor hace casi un millón de años.

Xalok, "Sólo descansamos en sábado", Público, 15 de junio de 2010
Larga infancia

La niñez es una de las características que hacen único al Homo sapiens, comparado con sus parientes vivos más cercanos, los chimpancés, que maduran mucho antes. Una niñez larga, seguida por la adolescencia, permite más años de crecimiento y desarrollo craneal, que a su vez origina el pensamiento, la organización social o el lenguaje. Tras comparar el estado de desarrollo de Jimena, a quien le acababa de salir el primer molar, con el de chimpancés y humanos modernos, el equipo de Atapuerca concluye que el H. antecessor
tenía un ritmo de crecimiento casi idéntico al de los humanos actuales. "Esta especie se desarrollaba exactamente igual que nosotros" señala Martinón-Torres. "Este descubrimiento supondrá una nueva crisis de identidad para los sapiens", sentencia.
Eudald Carbonell. Codirector de Atapuerca: "Se infiere que tuvo lenguaje"

1. ¿Cómo valora el hallazgo de 'Jimena' dentro del conjunto de Atapuerca?

Es importantísimo. Nos muestra que la biología del desarrollo de un homínido de hace algo menos de un millón de años era igual que la de los humanos de hoy. Este largo periodo de desarrollo infantil y juvenil hace posible la existencia de organización social y pensamiento complejo. También se puede inferir que tuvo alguna forma de lenguaje.

2. ¿Qué supone para la evolución humana?

Que la adquisición de complejidad cognitiva es muy antigua y gradual.

3. ¿Qué otros hallazgos se han hecho en la campaña anterior?

En la Sima del Elefante, hallamos un húmero de 1,3 millones de años con signos de canibalismo. También sacamos de Gran Dolina restos que evidencian una caza del bisonte muy especializada.

4. ¿Qué nuevos hallazgos ansía?

Un cráneo de neandertal. Así tendríamos restos humanos que abarcarían desde antecessor de hace 1,3 millones de años hasta sapiens de la Edad de Bronce.

Xalok, "Se infiere que tuvo lenguaje", Público, 15 de junio de 2010
Además aporta la prueba más antigua conocida de la aparición de ese desarrollo parsimonioso que haría posible que el antecesor llegase a desarrollar un cráneo de 1.000 centímetros cúbicos. Una niñez similar permitió al Homo sapiens llegar a los 1.200 centímetros cúbicos y a los neandertales a los 1.600.

La Gran Dolina de la que salió Jimena será uno de los lugares en los que desde hoy comience a excavar un equipo de 75 personas. Otro gran yacimiento en el que se continuará el trabajo del año pasado será la sima del Elefante, de donde han salido los restos de antecessor más antiguos que se conocen, con unos 1,3 millones de años. Ya entonces los huesos estaban marcados por el corte inequívoco de las herramientas de piedra que estos humanos usaban para despellejar y desmembrar los cuerpos. "El canibalismo ha aparecido en diferentes estratos temporales, parece una práctica cultural, tal vez una forma de combatir con grupos rivales", explica Martinón-Torres.

Refuerzos

El 1 de julio llegarán otros 75 excavadores que continuarán el trabajo en otros yacimientos como el Portalón, la Galería de las Estatuas y la célebre sima de los Huesos, de la que salió el cráneo casi completo del Homo heidelbergensis, un supuesto ancestro del hombre neandertal que vivió hace unos 500.000 años. "En cualquier momento nos pueden salir nuevos homínidos", advierte Eduald Carbonell, director del Instituto de Paleoecología Humana y Evolución Social y codirector de la excavación desde 1990. "Lo único que nos falta es encontrar un neandertal", añade. También se retomará la excavación del yacimiento Galería, donde se han encontrado caballos, bisontes y rinocerontes de hace entre 200.000 y 400.000 años. La zona no se toca desde 1995 y ahora los expertos van a dejarla "lista para su museización" , explica José María Bermúdez de Castro, director del Cenieh y otro de los mandamases de Atapuerca.

El 13 de julio se abrirá al público el nuevo Museo de la Evolución Humana, que exhibirá en Burgos parte de los miles de fósiles y herramientas hallados en Atapuerca y que abarcan desde hace más de un millón de años a la época romana.

La excavación se extenderá hasta el 25 de julio, ni un día más, pues no hay presupuesto. Se trabajará de lunes a domingo. Desde las nueve de la mañana y hasta las tres, se excava. Después se dedican unas cuantas horas más a limpiar las piezas encontradas en los laboratorios de campaña instalados en la residencia donde duermen los investigadores y estudiantes que realizan los trabajos. Además del Cenieh, dirigido por José María Bermúdez de Castro, los otros centros que aportarán la mayor parte de los recursos humanos son el Instituto de Paleoecología Humana y Evolución Social, de Tarragona, el Centro Universidad Complutense de Madrid - Instituto de Salud Carlos III de Evolución y Comportamiento Humanos y la Universidad de Zaragoza.

Nuño Domínguez, Madrid: Atapuerca: Regreso al hogar del antecesor, Público, 15 de junio de 2010

Un estudio confirma la cronología del Antiguo Egipto

La pirámide escalonada de Saqqara. Un análisis de 211 plantas ha confirmado en su mayor parte la cronología del Antiguo Egipto, según un estudio publicado hoy en Science. Para realizar el trabajo, un equipo internacional de investigadores, dirigido por el arqueólogo de la Universidad de Oxford (Reino Unido) Christopher Bronk, recolectó las muestras presentes en semillas, canastos, textiles, tallos de plantas y frutas asociadas directamente con reinados de antiguos reyes egipcios de colecciones de museos.

A continuación, los expertos combinaron los datos de radiocarbono con información histórica sobre el orden y la duración del mandato de cada rey para formar una cronología completa de las antiguas dinastías egipcias. En el trabajo de Science, comparan las fechas atribuidas según su método con las establecidas por dos especialistas: Ian Shaw, de la Universidad de Liverpool, y Erik Hornung, de la Universidad de Basilea (Suiza). Según explicó a este diario el egiptólogo del CSIC Andrés Diego, los datos obtenidos gracias al radiocarbono confirman casi todas las fechas de Shaw y no las de Hornung, que datan de hace menos tiempo y que, según este científico, establece fechas más recientes para todos los reyes.

Diego comenta que no sabe hasta qué punto los nuevos datos serán útiles para los egiptólogos, que se suelen basar más en la observación de textos que en este tipo de análisis. Sin embargo, el especialista destaca que una de las características destacables del trabajo es que afina mucho más en comparación con otros estudios realizados con carbono, "que establecían fechas mucho más dispares, con uno o hasta dos siglos de diferencia".

Aunque la nueva cronología coincide a grandes rasgos con la aceptada por los egiptólogos, existen algunos eventos cuya antigüedad aumenta respecto a las cronologías usuales. Es el caso del reino de Zoser que, según Shaw, comenzó en el 2.667 a. C. y, por la nueva cronología, se sitúa entre el 2.691 y el 2.625 a. C. Según el investigador del CSIC que explica que con el radiocarbono las fechas se fijan en horquillas temporales y no de forma concreta esto es lógico al tratarse del reinado más antiguo. "Cuanto más te alejas en el tiempo, la horquilla temporal es más grande", subraya. Los autores del estudio detallan también que encontraron ciertas discrepancias en los niveles de radiocarbono en el Valle del Nilo, pero sugieren que esto se debe a la inusual temporada de cultivo en Egipto, concentrada en los meses de invierno.

Por su parte, el especialista de la Universidad Ben-Gurion de Israel Hendrik Bruins explica, en un análisis que acompaña a la publicación del texto en Science, que la "investigación sistemática de Bronk supone un gran paso en la corroboración de la cronología dinástica egipcia con radiocarbono". Sin embargo, apunta a que ciertos periodos, como la dinastía decimotercera, deberían revisarse más exhaustivamente.

Ainhoa Iriberri, Madrid: Un estudio confirma la cronología del Antiguo Egipto, Público, 18 de junio de 2010

Los humanos de Atapuerca comían leones gigantes

Hace 300 Ilustración de los leones de las cavernas. Mauricio AntónHace 300.000 años, "el hombre era el verdadero rey del ecosistema", dice José María Bermúdez de Castro, director del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana y codirector de las excavaciones de Atapuerca. El experto explica así el hallazgo de unos restos fósiles examinados por el equipo de la excavación, y que sugieren que los Homo heidelbergensis que vivían en la sierra de Atapuerca (Burgos) incluían a los antiguos leones en su dieta. El estudio español se publicará en agosto en la revista Journal of Archaeological Science.

En el nivel TD10 de la Gran Dolina de Atapuerca, que tiene una antigüedad de entre 350.000 años y 250.000 años, los investigadores han encontrado restos del esqueleto de un león de las cavernas (Panthera leo fossilis). "Las marcas en los huesos sugieren que las vísceras fueron extraídas del animal", explica Bermúdez de Castro. Los investigadores creen que este dato indica que el animal fue cazado, ya que si hubiera muerto antes, otros depredadores habrían llegado en primer lugar.

Un felino gigante

El ejemplar de esta especie extinta de león medía más de dos metros y "pesaba unos 300 kilos", señala el codirector de las excavaciones. No obstante, el gran tamaño de este mamífero no fue un obstáculo para convertirse en pieza de caza para los heidelbergensis.

Los hombres de entonces medían 1,80 metros y "tenían una gran potencia física", comenta el paleoantropólogo. Por lo tanto, "no resulta extraño que un grupo de cuatro cazadores pudiera hacerse con una de estas piezas", añade. Este miembro de la familia humana se considera un ancestro del hombre de Neandertal (Homo neanderthalensis).

La caza de leones no es muy habitual para el ser humano, "aunque algunas comunidades actuales de masais realizan esta práctica", afirma Eudald Carbonell, también codirector de Atapuerca y coautor del estudio. Sin embargo, para los heidelbergensis "la caza de este ejemplar fue un suceso aislado", asegura Bermúdez de Castro. Además, la condición de gran depredador que ostenta el león hace que su presencia sea relativamente reducida. Las comunidades de estos felinos no suelen superar las decenas, mientras que las poblaciones de sus presas, como los ciervos, pueden llegar a miles.

Las víctimas más habituales de aquellos parientes extintos de los humanos actuales eran los corzos, gamos "e incluso rinocerontes", añade Bermúdez de Castro. De hecho, el nivel donde se ha realizado el hallazgo contiene miles de restos de estos animales.

Marta del Amo, Madrid: Los humanos de Atapuerca comían leones gigantes, Público, 18 de junio de 2010

lunes, 14 de junio de 2010

Diplomáticos (pocos) contra Franco

Juan Negrín interviene ante la Sociedad de Naciones en Ginebra en 1937.- A los pocos días de llegar a Londres como nuevo embajador en septiembre de 1936, Pablo de Azcárate coincidió en un banquete con su amigo lord Cecil of Chelwood, que le intentó presentar a Winston Churchill. "Al oír que se trataba del embajador de España, rojo de ira y sin estrechar la mano que yo instintivamente le tendía, Churchill declaró que no quería tener relación alguna conmigo y se alejó murmurando entre dientes: "Sangre, sangre...".

Este extracto de las memorias de Pablo de Azcárate, uno de los diplomáticos leales a la Segunda República, evidencia la soledad internacional del Gobierno español democrático al inicio de la Guerra Civil. Nunca Azcárate tuvo oportunidad de entrevistarse con los primeros ministros británicos (Stanley Baldwin y, desde mayo de 1937, Neville Chamberlain). Las guerras también se pierden en las alfombras.

Desde luego, explica el historiador Ángel Viñas, la República española fracasó en el campo de batalla y en las cancillerías. Entre otras razones porque la mayoría del cuerpo diplomático se pasó con todas sus (pacíficas) armas al bando de Franco. De los 400 miembros que pertenecían a la carrera, solo medio centenar siguió leal al Gobierno republicano. Una cifra que aún tiene otra merma, ya que de ella Viñas excluye a los 10 "traidores" que protagonizaron un doble juego, poniendo una vela a Dios y otra al diablo. Sirva el ejemplo del cónsul español en Estambul, que espió para el bando sublevado en un lugar estratégico: por el estrecho de Dardanelos surcaban los buques soviéticos cargados con armas para el ejército rojo. Los traidores, claro está, se incorporaron de inmediato a la nueva carrera diplomática al finalizar la guerra.

Viñas ha dirigido la obra Al servicio de la República. Diplomáticos y Guerra Civil (Marcial Pons), el primer estudio histórico que indaga en el papel de los leales y traidores al Gobierno constitucional. También en este campo la historia parecía dar un salto en el vacío, como si una parte del periodo transcurrido entre 1936 y 1939 se hubiese desvanecido. Para resarcir esta laguna, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, presidió en diciembre un acto de rehabilitación de todos aquellos que fueron sancionados, depurados o expulsados de sus cargos por la dictadura. En ese empeño por recuperar cierto pasado olvidado, Moratinos también ha impulsado la investigación en la que han participado ocho historiadores. "Hasta ahora no había habido un estudio sistemático de los esfuerzos republicanos por romper el cerco internacional al que se vio sometida la República por parte de las democracias occidentales", expone el director de la obra.

Se examinan embajadas vitales en aquel contexto: Londres, París, Washington, Moscú, Praga, Berna y México. La sublevación trastocó por completo la legación española en Francia. "Juan Francisco de Cárdenas, que inicialmente pareció respetar la legalidad republicana, paralizó cuanto pudo el pedido de armas hechas a [León] Blum", escribe Ricardo Miralles, catedrático de Historia Contemporánea del País Vasco. Cárdenas, que cambió finalmente de bando, fue sustituido en la Embajada por Álvaro de Albornoz.

La República envió a Fernando de los Ríos a la Embajada de Washington con el objetivo de romper su neutralidad, cuestionada por muchos estadounidenses, incluida la primera dama Eleanor Roosevelt, que escribió en 1938: "La ley de neutralidad no nos ha hecho neutrales... no es en absoluto una ley de neutralidad, pero muy poca gente se da cuenta de ello". Cuenta Soledad Fox, catedrática de Literatura e Historia Española Contemporánea en el Williams College de Massachusetts, que De los Ríos llegó a ser "una figura admirada y respetada", que logró el envío de unidades médicas (capitaneadas por el cirujano Edward Barsky) a la zona republicana. Se estrelló, sin embargo, al intentar deshacer el embargo sobre la venta de armas. El oficial, porque el clandestino florecía gracias a los envíos de la petrolera Texaco y General Motors a los sublevados.

En el caso británico, Enrique Moradiellos, catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Extremadura, observa cierta bipolaridad: se conquista a la opinión pública y se fracasa ante el Gobierno. Una encuesta de 1938 realizada por el British Public Opinion revelaba que el 58% de la población simpatizaba con la causa republicana y solo un 8% se decantaba por Franco. Similar corriente de simpatía se dio en el ámbito artístico e intelectual: cinco autores (entre ellos Evelyn Waugh) apoyaron a Franco en una encuesta frente a 126 que defendían al bando republicano, entre ellos Samuel Beckett, Aldous Huxley, Arthur Koestler, Sylvia Pankhurst o Leonard Woolf. (Como indecisos se definieron Ezra Pound y T. S. Eliot). Pese a la "magnitud de ese movimiento solidario, debe reconocerse que ni el propio Azcárate ni los partidarios de la República fueron capaces de utilizarlo para modificar la política no-intervencionista del Gabinete británico", escribe Moradiellos.

Lo de la no intervención tiene su guasa. Entre los documentos localizados para este libro, Viñas ha recuperado en el archivo del Banco de España pruebas de lo que él define "puñalada trapera" del British Overseas Bank (BOB) al paralizar los pagos de nóminas y gastos de las embajadas españolas en el exterior, a pesar de la existencia de fondos en la cuenta del Gobierno. "En mi opinión, es imposible que un banco inglés se arriesgue a hacer algo así sin apoyo político", sostiene Viñas.

Tereixa Constenla, Diplomáticos (pocos) contra Franco, EL PAÍS, 12 de junio de 2010

domingo, 13 de junio de 2010

Supervivientes españolas en el infierno nazi

Ravensbrück: el puente de los cuervos. Siniestro nombre para el campo de concentración alemán donde estuvieron presas unas 132.000 mujeres de 40 países. Entre ellas, 400 españolas, de las que ya casi no quedan supervivientes. Cuando se cumplen 65 años de la liberación del horror, hemos hablado con tres de ellas.

Neus català con el traje de deportada en Holleischen (Checoslovaquia)- ÁLBUM FAMILIAR FOTOGRAFÍA DE MONTSERRAT LLORCon 22 grados bajo cero, a las tres de la madrugada del 3 de febrero de 1944, 1.000 mujeres entramos en Ravensbrück. Con 10 SS y sus 10 ametralladoras, con 10 perros lobos dispuestos a devorarnos, empujadas bestialmente, hicimos nuestra entrada triunfal en el mundo de los muertos. 'de la resistencia y la deportación', Neus Català

Dantesca y cruel. Así fue la entrada de miles de mujeres en uno de los peores campos nazis durante la II Guerra Mundial: Ravensbrück, cerca del pueblo de Fürstenberg, un lugar pantanoso unos 90 kilómetros al norte de Berlín. Una gran mayoría fueron presas por motivos políticos: luchaban contra el fascismo. Las españolas también. Habían combatido para defender la libertad y los valores de la II República durante la guerra civil española, pero Franco ganó la batalla y el exilio fue inevitable.

Terminaba la Guerra Civil en febrero de 1939 y en septiembre de ese mismo año comenzaba la II Guerra Mundial y la expansión de Hitler. De una u otra forma, sin importar nacionalidades, todas lucharon por unos ideales: colaboraron con la Resistencia, sirvieron de enlaces o combatieron como antiguas brigadistas internacionales. Un día fueron capturadas por la Gestapo y conducidas a los campos de concentración.

De la deportación femenina siempre se ha hablado menos. Sufrieron todos, hombres y mujeres, pero a ellas habría que añadir otros sufrimientos adicionales, los que se desprenden de su propia condición de mujer: experimentos médicos, esterilización, eliminación de sus hijos ante su presencia e incluso prostitución.

El impacto físico y psicológico generado en ellas creó una larga etapa de silencio e introspección.

Acaban de conmemorarse los 65 años de la liberación de los campos nazis y muy pocas mujeres siguen con vida. Muchas viven en Francia, país que acogió a los españoles temerosos de las represalias del franquismo. Nos desplazamos hasta sus domicilios para conocerlas, recordar detalles inéditos de sus vivencias, ver cómo viven y cómo lo recuerdan todo. Incluso saber cómo lograron superar aquella experiencia tan traumática.

Tienen entre 85 y 95 años: Neus Català, que reside actualmente en Rubí (Barcelona); Conchita Ramos, en Toulouse, ciudad en la que ha vivido siempre, aunque nació en Cataluña, y Lise London, en París, una mujer francesa de padres aragoneses y con profundas raíces en nuestro país. En París fue imposible visitar, por su delicado estado de salud, a Carmen Cuevas, nacida en Sueca (Valencia), deportada también a Ravensbrück. No se tiene noticia de la existencia de más supervivientes españolas en campos nazis, según indica la asociación Amical de Ravensbrück, cuya sede en España se encuentra en Barcelona. Neus Català es la presidenta de honor de dicha asociación, y su hija, Margarita Català, igual de activa y solidaria que su madre, forma parte del Comité Internacional de esta entidad junto con Teresa del Hoyo, secretaria de la Amical Ravensbrück, y Anna Sallés, su vicepresidenta ejecutiva. La Amical rinde homenaje a estas mujeres dando la máxima difusión a aquellos acontecimientos y recuperando las voces de las supervivientes.

Entre 1939 y 1945, la fecha de su liberación, fueron presas en este campo unas 132.000 mujeres de más de 40 países, sobre todo de Polonia, Alemania, Austria y Rusia. Algunas, pocas, llegaron con sus hijos, la mayoría exterminados, al igual que los cerca de 20.000 hombres que a partir de abril de 1941 fueron destinados a un anexo construido para ellos.

Eran agrupadas en función de sus características o condición: delincuentes comunes, judías, gitanas, políticas, homosexuales o testigos de Jehová... Todas eran marcadas con un triángulo invertido de diferente color. Verde para las presas comunes, negro para las criminales, amarillo para las judías. Las españolas, unas 400, aproximadamente, de las que apenas existe información ni datos precisos, fueron señaladas con el color rojo destinado a las presas políticas más un número de matrícula. Ya no tendrían jamás un nombre. Sólo un número que las supervivientes recuerdan a la perfección incluso hoy.

Existen los grandes horrores de este campo. Como el quirófano donde el temido doctor Gebhardt y su equipo efectuaban horribles experimentos médicos con mujeres y niñas, las llamadas kaninchen o conejitas de Indias. Y el crematorio, inaugurado en abril de 1943, y la cámara de gas, a finales de 1944. Allí fueron gaseadas unas 6.000 presas, pero al mes morían, de promedio, 1.000 mujeres debido a las pésimas condiciones higiénicas, la tuberculosis, la disentería o el tifus.

Viendo el final de su imperio, a finales de marzo de 1945, Himmler ordenó la evacuación de los campos, y el comandante de Ravensbrück, Fritz Suhren, mandó salir a todas las mujeres que aún quedaban con vida y en condiciones de caminar. Eran las conocidas marchas de la muerte en las que tantos presos quedaron sin vida en la cuneta de las carreteras. Habían dejado en el interior del campo a cerca de 2.000 mujeres, muchas moribundas, que el Ejército Rojo encontró en el momento de la liberación, el 30 de abril de 1945. Eran libres, pero muchas morirían a los pocos días, tan debilitadas y enfermas estaban. Las rusas padecieron después otro horror: su traslado a los gulags estalinistas. Las españolas tampoco pudieron volver en muchos años a España, donde gobernaba Franco.

NEUS CATALÀ

Neus català con 95 años, mantiene su energía.- ÁLBUM FAMILIAR FOTOGRAFÍA DE MONTSERRAT LLOR"Ravensbrück aún me impresiona. En cuanto piso Alemania, me cambia la cara y no me doy cuenta. Me viene la entrada, es algo que nunca he conseguido explicarlo, la llegada a las tres de la madrugada por un camino de piedras y con un frío que pelaba.

En el Báltico era el infierno, pero helado y, día tras día, oscuro, tétrico... Siempre me viene aquello".

Lo cuenta sentada en el sillón de su casa en Rubí (Barcelona), mientras sostiene en sus manos una piedra pequeña y redonda. Le encanta la energía de la piedra. Es natural, Neus Català, a sus 95 años recién cumplidos, es una mujer fuerte, de carácter enérgico y rebelde, que sobrevivió por su dureza y su buen humor. Ella asegura que fue cuestión de suerte y tener un espíritu fuerte. Me dice que, en cierto modo, la ayudaron las golondrinas de su calle.

"Me gustaban mucho. Yo no sabía dibujar, pero allí en el campo lo hacía, y esto me ayudó a no pensar en otras cosas".

Nació en Els Guiamets (El Priorat, Tarragona). Hija de campesinos, adoraba a su padre, con quien compartió su pasión por el teatro. Organizó las Juventudes Socialistas Unificadas de Cataluña (JSUC) y fue miembro fundador del PSUC. Diplomada en Enfermería, al final de la Guerra Civil cruzó la frontera y se estableció en Francia. Junto con su primer marido, Albert Roger, fallecido durante la deportación, participó en actividades de la Resistencia francesa y llegó a ser enlace interregional con seis provincias a su cargo. Su casa era un punto clave donde escondía a guerrilleros españoles y franceses y a antiguos combatientes de las Brigadas Internacionales. Centralizaba la transmisión de mensajes, documentación y armas. Hasta que fue denunciada a los nazis.

Fue detenida junto con su marido y tres guerrilleros más el 11 de noviembre de 1943 por la Gestapo. Sufrió su primer interrogatorio a punta de pistola en cada sien y fue conducida a la cárcel de Limoges, en cuya komandatur recibió una gran paliza. Fueron dos largos meses y la última vez que vio a su marido.

Como todos los deportados, fue trasladada al campo de concentración a bordo de un tren de ganado en condiciones infectas. El recuerdo de aquellos vagones quedó imborrable en todos, hombres y mujeres. En su interior la situación era insostenible, imperaba el miedo: "Mil mujeres, muchos vagones y cuatro días de viaje sin parar, sin higiene, sin aire para respirar, sin saber qué sería de nosotras. No teníamos sitio para sentarnos, nos apañábamos, poníamos espalda contra espalda como podíamos. Éramos 90 o más en cada vagón con un cubo de basura en medio para hacer nuestras necesidades y que con el traqueteo se volcaba. Olía muy mal. Algunas salieron muertas ese 3 de febrero de 1944, cuando desembarcamos en Ravensbrück".

Comenzaba el ritual del terror que todas recuerdan. Duchas de "desinfección", pelo rapado al cero, inspección de todos los rincones del cuerpo, el traje de rayas y un número. El de Neus: 27.532. Antes que nada, eran encerradas para pasar la cuarentena, momento en que vio morir a varias compañeras. Una de las situaciones más humillantes para las mujeres era el exhaustivo control ginecológico, efectuado en condiciones vergonzosas y antihigiénicas. Con el mismo utensilio eran inspeccionadas todas las presas. "A todo mi grupo nos pusieron una inyección para eliminarnos la menstruación con la excusa de que seríamos más productivas. Ocurrió en 1944; no la volví a tener hasta 1951".

Las embarazadas tenían pocas o ninguna esperanza de sobrevivir. "Se salvaron muy pocas; los bebés nacidos eran automáticamente exterminados, ahogados en un cubo de agua, o los tiraban contra un muro o los descoyuntaban. Ellas agonizaban por las malas condiciones higiénicas del parto o se volvían locas por la impotencia de presenciar tales asesinatos".

Aun así, y aunque parezca imposible, consiguió robar algunas risas a sus compañeras. El domingo era el día destinado al despioje y, por la tarde, al ocio. Neus procuraba distraer a las demás, contar chistes, leer, "lo que fuera, con tal de no dejarse llevar por el abatimiento". "También recuerdo que al principio me dieron unos zapatos del 43 cuando yo calzo un 36, y claro, al ser tan largos, hacía la broma de ser Charlot. Así que le imitaba y nos reíamos un poco".

Una noche irrumpió de repente en su barracón un grupo de Aufseherinen con sus perros ladrando. Llamaron a gritos a varias mujeres, siempre por su número; entre ellas, a Neus. Las presas se despidieron con nerviosismo pensando que era su último adiós, que se trataba de una selección para la cámara de gas. Sin embargo, fueron introducidas en un tren y tras varios días de viaje llegaron a Holleischen, en Checoslovaquia, un pequeño campo dependiente de otro central de hombres, Flossenbürg. Allí fue destinada a trabajar en la industria armamentística nazi. Día y noche se fabricaban armas, obuses, balas, sin parar. "Mientras podías producir, te perdonaban la vida".

En este lugar recibieron un peculiar nombre: el Comando Faul, de las holgazanas, denominadas así por su baja producción de armas. Cada equipo debía fabricar series de 10.000 piezas cuyo funcionamiento correcto se probaba. "En las balas escupíamos o poníamos aceite, porque cualquier cosa mezclada con la pólvora las inutilizaba. No parábamos de escupir. Escupir y ¡sabotear, sabotear, sabotear! En nueve meses en nuestro comando la producción bajó de 10.000 piezas a la mitad. Dejamos 10 millones de balas inutilizadas".

El día de la liberación las encerraron en el barracón y minaron el campo para hacerlo saltar en pedazos a las doce en punto. "Bloquearon las puertas con barras de hierro y vimos que se escapaban las SS. Por la ventana observamos un frente de fuego enorme y supimos que algo pasaba. '¡Están entrando los rusos en Praga, estamos salvadas!".

El primer marido de Neus murió tras la liberación. Dos años más tarde conoció al que fue su segundo esposo en una casa de reposo; con él tuvo a sus dos hijos. Natural de un pueblo de Segovia, Juarros del Río Moros, fue comisario general de las guerrillas españolas.

Años después de la liberación, Neus tuvo el coraje y casi atrevimiento de llamar a la puerta de antiguas compañeras deportadas para entrevistarlas, escribir su testimonio y darlo a conocer a la humanidad. Algunas no quisieron hablar, pero ella no se dio por vencida y persistió. Así consiguió editar el libro De la resistencia y la deportación. 50 testimonios de mujeres españolas, que publicó casi cuarenta años después. La herida aún estaba muy abierta.

LISE LONDON

Sus padres eran aragoneses y ella, Lise Ricol, más conocida como Lise London por su marido, Arthur London, fue miembro de las Brigadas Internacionales en Albacete. Es francesa, pero habla español perfectamente y conoce nuestro país. En el portal de su piso de París hay una placa en recuerdo de su esposo, con quien compartió ideales y una convencida militancia comunista.

Lise estuvo en contacto con Santiago Carrillo, con quien mantiene aún hoy una excelente relación, y trabó amistad con Dolores Ibarruri, la Pasionaria, a la que conoció durante su estancia en Rusia cuando tenía 18 años.

Su casa es espaciosa e iluminada y parece un pequeño museo. Cuadros regalados por sus amigos, dibujos y pinturas que ella misma hizo a sus hijos y, en el salón, una gran fotografía en blanco y negro con el rostro de su marido, Arthur London, escritor y político checoslovaco que estuvo preso en Mauthausen. Lise o Elisabet es una mujer culta a la que le gusta escribir y pintar. Y que disfruta con su pasado, como militante de las juventudes comunistas, como resistente, como brigadista. Es fácil comprenderlo cuando uno lee su libro Memorias de la Resistencia, en el que narra miles de situaciones que parecen extraídas de una película de intriga y espionaje.

Lise London nació el 15 de febrero de 1916 en el pueblo minero de Monceau-les-Mines. Sus padres emigraron a Francia en pésimas condiciones económicas y a los 15 años era militante comunista, al igual que sus dos hermanos. En 1934 partió hacia la Unión Soviética, trabajó de mecanógrafa en el Bureau del Komintern y allí conoció a Arthur London, con quien se casó en segundas nupcias. En 1936 trabajó, hasta julio de 1938, en el cuartel general de las Brigadas Internacionales en Albacete. De vuelta en Francia, nació su primera hija y comenzó a trabajar en La Voz de Madrid, el órgano de los republicanos españoles refugiados en Francia, y más tarde, en el Centro de Documentación y Propaganda de la República española. En julio de 1940, Lise entró en la Resistencia y en agosto de 1942 encabezó una manifestación en pleno corazón de París en la que hizo un llamamiento contra los alemanes, pidió una Francia libre y apeló a la lucha armada. Con la llegada de los soldados alemanes, todo el mundo comenzó a gritar y a correr. Hubo disparos y una muerte. Lise fue arrestada, encarcelada durante más de un año, juzgada y condenada a muerte. El embarazo de su segundo hijo la salvó de la pena capital, pero fue dictada orden de trabajos forzados a perpetuidad. En 1944, Pétain firmó un acuerdo con Alemania según el cual los prisioneros políticos franceses debían ser trasladados a campos de trabajo alemanes porque necesitaban mano de obra. Fue deportada a Ravensbrück, adonde llegó el 15 de junio de 1944. Mientras Lise London entraba en los campos nazis, su marido Arthur y su hermano habían sido deportados al campo de Mauthausen, en Austria, donde permanecieron más de 8.000 españoles y salieron con vida apenas 2.000.

Era la responsable de mantener en orden y limpio su barracón. Esa función le permitió aportar algunos momentos de alivio a sus compañeras y reforzar su ánimo para seguir el día a día, sobrevivir y no desfallecer. "Organizamos todo tipo de actividades para animar a las presas. Hacíamos teatro, poesía, actividades, incluso llegué a ocultar una pequeña biblioteca, algo absolutamente prohibido. La moral es una herramienta básica". Pero el hambre las acechaba permanentemente. "Por la mañana tomábamos café aguado con una ración de pan. Comíamos una especie de sopa con alguna cosa dentro y poco más, alguna patata. El domingo daban pan y margarina con un poco de queso".

En su barracón consiguieron montar una estructura de supervivencia muy útil para las deportadas. Se organizaron en pequeñas familias de cinco o diez mujeres en las que una presa asumía el papel de madre. Era el apoyo directo moral, emocional.

En el momento de finalizar la entrevista, se despide diciéndome: "Y recuerde, yo nunca tuve miedo, ¡jamás! Yo era una luchadora".

CONCHITA RAMOS

Conchita Ramos a punto de cumplir 85 años.- ÁLBUM FAMILIAR FOTOGRAFÍA DE MONTSERRAT LLORTiene un hablar dulce, buena memoria y una conversación convincente y repleta de detalles. La entrevista con Conchita Ramos se desarrolla en un lugar peculiar: el Museo de la Resistencia y la Deportación, en Toulouse, dirigido por Guillaume Agulló, descendiente de catalanes. Allí, varias tardes a la semana, Conchita se dedica a impartir charlas a los adolescentes. El espacio es sencillo pero interesante, repleto de fotografías, trajes de presos expuestos, dibujos y pinturas de prisioneros y diversos objetos, como máquinas de escribir o transmisores de radio de la guerra.

Al bajar por las escaleras precisa ayuda, un punto de apoyo. Una fuerte artrosis se le desencadenó a partir de los 50 años. Esta es una de las consecuencias más evidentes fruto de los siete interrogatorios que sufrió en manos de la Gestapo.

Conchita Ramos nació el 6 de agosto de 1925 en Torre de Capdella (Pallars Jussà, Lleida). De padre francés -Josep Grangé- y madre española -María Veleta-, en los primeros meses de vida fue trasladada a Toulouse, donde fue educada y criada por sus tíos. Por eso su historia está íntimamente unida a las dos mujeres más cercanas: su tía Elvira y su prima María; la familia Veleta.

Su tío participó en la Resistencia organizando grupos de maquis en la zona del Ariège; tras su huida -para no caer en manos de la Gestapo-, Conchita, una joven de apenas 17 años, se hizo cargo de la situación, reorganizó grupos de la Resistencia y fue integrada en la 3ª brigada de guerrilleros el mes de abril de 1943. Así fue como se convirtió en enlace. Siempre en compañía de las mujeres Veleta. Recibían los partes, propaganda, cartas y órdenes de misión que llevaban a ciertos jefes del maquis.

El 24 de mayo de 1944, a las nueve de la mañana, los milicianos, la policía de Pétain, rodearon su casa de Francia justo cuando tenían a un grupo de tres hombres escondidos preparado para ir, al día siguiente, hacia la frontera, y a un guerrillero, el capitán Ríos. Tras producirse un tiroteo, las tres mujeres fueron trasladadas a la prisión de Foix y, más tarde, entregadas a la Gestapo para ser interrogadas. En esta casa existe todavía hoy una placa en recuerdo a la memoria de las Veleta y su labor por la Resistencia.

Fue entonces cuando Conchita, muy joven, con apenas 18 años, recibió los primeros golpes y bastonazos de manos de la Gestapo. Su único objetivo era no hablar. Y lo consiguió. "Vi cómo les arrancaban las uñas de pies y manos a hombres y mujeres. Tenía miedo de hablar, pero no lo hice".

Las tres mujeres permanecieron juntas en su viaje hasta el campo de deportación a bordo del terrible Tren Fantasma, el gran tren de los resistentes que tardó dos meses en llegar a su destino en Alemania. A bordo había 700 hombres y 65 mujeres. "Dentro del convoy, en pleno mes de agosto, cumplí los 19 años".

Era un tren de ganado, maloliente, que recogió a presos de varias cárceles y de campos como el de Vernet o el de Noé, de donde salieron unas 200 españolas y volvieron unas pocas. Resulta casi una ironía que fueran enviadas a la muerte tantas personas justo cuando el fascismo comenzaba a perder su auge. Tras una parada y pocos días en Dachau para dejar a los hombres, las mujeres seguirían su camino inexorable e incierto hasta llegar a Ravensbrück el 9 de septiembre de 1944.

Nada más llegar se produjo la primera selección. Las jóvenes, fuertes y aptas para trabajar, vivían; las demás eran gaseadas. Las tres mujeres Veleta seguían juntas. "En Ravensbrück he visto a las SS pegar con saña por cualquier cosa, a mujeres mayores, a los niños, y hemos pasado horas inmóviles al pasar lista en la Apellplatz. Allí, quietas bajo un frío tremendo y débiles, algunas caían y no las podías ayudar o te echaban a los perros encima".

Ver a algunas mujeres brutalmente mordidas por los perros y la imagen de niños golpeados y asesinados son los dos recuerdos que más impactaron a Conchita durante años. La maternidad también es uno de los temas más sensibles y dolorosos. Hicieron barbaridades con las madres. "Muchas fueron detenidas y no supieron durante años qué pasó con sus hijos. Los buscaron después con la ayuda de la Cruz Roja. Algunas tuvieron suerte y los encontraron en orfelinatos. Otras jamás volvieron a saber nada más".

Conchita presenció el asesinato de tres niños. "Lo recuerdo perfectamente. Uno de ellos, el más pequeño, tenía sólo tres o cuatro años y corría por la calle de los barracones. Una de las Aufseherinen le gritó, pero el niño no la escuchó y ella le lanzó el perro. Lo mordió y lo destrozó. Después ella lo remató a palos".

La maldad llegó al paroxismo en los experimentos médicos. "Cuando me dijeron 'te enseñaremos a las petites lapines' -conejitas-, yo, inocente, preguntaba si acaso conseguiríamos conejos para comérnoslos. Nos llevaron a un barracón donde vi mujeres a las que les habían operado las piernas, cortado tendones, los músculos, rasgado la piel, se les veía el hueso, todo para experimentar con el cuerpo humano. Tenían unas cicatrices horribles. A otras les inoculaban productos químicos o las amputaban".

Al poco tiempo fue conducida, una vez más junto con su tía Elvira y su prima María, a un Komando de Auberchevaide, una barriada de Berlín, donde debían trabajar, día y noche, junto con otras 500 mujeres, en un gran barracón de madera. Fabricaban material de aviación, y también lo saboteaban. "Yo debía controlar las piezas, pero hacíamos sabotaje. Lo hacíamos todas. Me dieron muchos bastonazos y me cortaron el pelo al rape. De 650 mujeres quedamos sólo 115".

Conchita tiene muchas condecoraciones, como la Legión de Honor del Gobierno francés y la Medalla de la Resistencia; y posee el grado militar de sargento -lo recibieron las mujeres que hicieron de enlace-. Actualmente es la vicepresidenta de la Asociación de Deportados del Tren Fantasma.

En las navidades de 1946 se casó con el que hoy es su marido, Josep Ramos. La vuelta fue muy traumática y le costó superar el silencio; la ayudó su entorno y el nacimiento de su primer hijo, en noviembre de 1947.

Montserrat Llor, Supervivientes españolas en el infierno nazi, EL PAÍS / EL País Semanal, 13 de junio de 2010